El ex oficial de la policía de Oklahoma City Daniel Hotlzclaw ha sido condenado a 263 años consecutivos de prisión por varias violaciones de mujeres afroestadounidenses. Mientras esperaban la sentencia en una sala de audiencias colmada de personas, quienes apoyan a las víctimas comenzaron a cantar una canción.
La canción decía: “Soy amada, soy amada, soy maravillosa, soy maravillosa, soy fuerte, soy fuerte”.
La condena a 263 años de prisión fue emitida después de que el juez Timothy Henderson negara la solicitud de Holtzclaw de realizar un nuevo juicio. En diciembre, un jurado integrado únicamente por personas blancas condenó a Holtzclaw de violación y otros delitos contra ocho de las trece mujeres que lo acusaron. Holtzclaw atacaba a las mujeres cuando las detenía por infracciones de tránsito o durante interrogatorios y las obligaba a realizar actos sexuales en su patrullero o en el domicilio de las mujeres. Los fiscales afirman que Holtzclaw buscaba deliberadamente a mujeres afroestadounidenses vulnerables de barrios de bajos recursos. Se informó que estaba siendo investigado por la unidad de delitos sexuales de la policía de Oklahoma City seis semanas antes de que cometiera su último delito, lo que significa que mientras estaba siendo investigado Holtzclaw atacó a la mitad de las mujeres por las que fue condenado de agredir. Una reciente investigación de Associated Press reveló alrededor de mil casos en Estados Unidos en que se destituyó a oficiales de policía por abuso sexual o mala conducta en un período de seis años. Tras la condena, Jannie Ligons, la primera víctima en denunciar los abusos del oficial Holtzclaw, dijo que se hizo justicia.
Ligons afirmó: “Hoy se hizo justicia. Solo sé que estoy muy contenta, especialmente por todas las víctimas traumatizadas después de todo lo que tuvimos que sufrir”.