Continúa el derramamiento de sangre cerca de Chechenia. En la mañana del viernes, las fuerzas especiales rusas atacaron a una comisaría en el sur de Rusia donde ocho rebeldes habían sido tomados como rehenes. Funcionarios rusos sostienen que los rehenes, entre los cuales había oficiales de policía, fueron liberados y que los ocho rebeldes fueron asesinados mientras intentaban escapar en una camioneta. Este fue el último incidente en una seguidilla de batallas sangrientas que duraron 24 horas, y el número de muertes podría alcanzar las 100 personas. En la mañana del jueves, grupos numerosos de francotiradores atacaron edificios del gobierno, establecimientos de telecomunicaciones y el aeropuerto en la ciudad de Nalchik. Los rebeldes chechenos se atribuyeron la responsabilidad de los ataques.
Ataques en Rusia dejan más de 100 muertos
Titular14 Oct. 2005