El gobierno de Bush está impulsando nuevamente la renovación de la Ley Patriota antes de que quede sin efecto a principios del mes próximo. El Congreso le otorgó a la Ley Patriota una extensión provisoria hace dos semanas, en medio de preocupaciones bipartidistas de que su renovación carece de garantías adecuadas de las libertades civiles.
El Presidente Bush dijo el martes: “Hay supervisión en este importante programa y ahora, cuando es el momento de renovar la ley, por razones partidistas, en mi opinión las personas no la apoyaron y acordaron que aún es necesario proteger al país. El enemigo no se ha ido. Aún están ahí y espero que el Congreso entienda que aún estamos en guerra y que debe darnos las herramientas necesarias para ganar la guerra”.