Mientras que el domingo comenzó el cuarto año de ocupación estadounidense en Irak, se llevaron a cabo protestas contra la guerra en todo el mundo. Decenas de miles de personas salieron a las calles a protestar en ciudades de Estados Unidos, Canadá, Asia, Europa y Australia. En Irak, manifestantes protestaron en Basora y Bagdad contra la actual ocupación estadounidense.
El tercer aniversario de la guerra de Irak no puso fin a la violencia que se apoderó del país. Al menos 45 personas fueron halladas muertas desde el domingo.
Mientras tanto. El ex primer ministro interino de Irak, Iyad Allawi, dijo que considera que Irak está en medio de una guerra civil. En una entrevista con la BBC, Allawi dijo: “Cada día perdemos un promedio de entre 50 y 60 personas o más, en todo el país. Si esto no es una guerra civil, sólo Dios sabe qué es una guerra civil”.
En otras noticias sobre Irak, imágenes de un video grabado por un joven estudiante de periodismo iraquí provocaron la investigación de cerca de una docena de infantes de marina estadounidenses por cometer posibles crímenes de guerra. El video fue filmado luego que una bomba al costado de una carretera mató a un infante de marina estadounidense en Haditha. Más tarde, soldados estadounidenses atacaron casas en esa área y mataron a 15 civiles. En un principio, el Pentágono atribuyó la responsabilidad de las muertes al atentado con bombas que mató al soldado. Pero unos meses después se abrió una investigación cuando un periodista de la revista Time le entregó la grabación a las Fuerzas Armadas. El video muestra a las víctimas tiradas en las casas bombardeadas. Tres niños murieron.
Mientras tanto, la policía iraquí acusó a soldados estadounidenses de asesinar a 11 civiles en un ataque llevado a cabo la semana pasada. Según un informe de la policía iraquí obtenido por la agencia de noticias Knight Ridder, los residentes de la localidad fueron asesinados luego que soldados estadounidenses los llevaron a una habitación en una casa cerca de la ciudad de Balad. Entre los muertos se encontraban dos niños, un bebé de seis meses y una anciana. El informe dice que los soldados quemaron tres vehículos, mataron a los animales de los habitantes e hicieron explotar la casa. Un comandante de la policía local dijo que todas las víctimas fueron halladas con las manos esposadas y con heridas de bala en la cabeza.
El New York Times reveló nuevos detalles de los abusos sistemáticos en las prisiones llevados a cabo por una unidad militar estadounidense especial ubicada cerca del aeropuerto de Bagdad.
Según el Times, Task Force 6-26 (Fuerza Operante 6-26) golpeaba regularmente a los detenidos iraquíes, les escupía la cara y los utilizaba como blancos de tiro cuando jugaban a disparar bolas de pintura en la base conocida como Camp Nama. A los prisioneros se les negaba el contacto con abogados o familiares y los mantenían detenidos por semanas sin cargos en su contra. Los abusos continuaron a pesar de las advertencias de los investigadores del Ejército que comenzaron en agosto de 2003, e incluso luego de que el escándalo de Abu Ghraib se hizo público, menos de un año después. Se informó que la unidad tenía el lema: “Si no los haces sangrar, no te pueden procesar”.
El Secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, comparó la situación actual al período posterior a la Segunda Guerra Mundial. En un editorial de la edición dominical del Washington Post, Rumsfeld escribió: “Darle hoy la espalda al Irak de la posguerra, sería el equivalente moderno a entregarle la Alemania de la posguerra a los Nazis”.
Mientras tanto, un ex general militar estadounidense exhortó a Rumsfeld a que renuncie. El ex General Paul Eaton, que estaba a cargo de entrenar a los soldados iraquíes tras la invasión estadounidense, escribió en la edición del domingo del New York Times: “[Rumsfeld] se mostró estratégica, operativa y tácticamente incompetente, y es mucho más responsable que cualquier otra persona de lo que le sucedió a nuestra importante misión en Irak”.
En otras noticias, el ex Presidente Jimmy Carter catalogó lo que él llama la “colonización de Palestina” por parte de Israel como el “principal obstáculo para la paz”. Carter escribió en el periódico israelí Ha’aretz, que la ocupación de Cisjordania y Gaza por parte de Israel ha impedido un amplio acuerdo de paz con los palestinos, independientemente de si estaban bajo el gobierno de Yasser Arafat, Mahmoud Abbas o Hamas. Carter también cuestionó los ofrecimientos que Israel le hizo a los palestinos durante los años del proceso de la paz de Oslo, alegando que en el mejor de los casos llegaron a retirar sólo un pequeño número de los más de 220.000 colonos en Cisjordania. Carter también escribió que el continuo control de Israel de las fronteras y espacios aéreos de Gaza provocan que el área sea una “entidad económica y política inviable”, mientras que las perspectivas para Cisjordania siguen siendo “igualmente terribles”.
En Venezuela, el Presidente Hugo Chávez lanzó el domingo el último de sus ataques retóricos contra el Presidente Bush.
Chávez dijo: “Lo peor que ha habido en este planeta, de lo peorcito que ha habido, se llama George W. Bush. ¡Dios libre al mundo de esta amenaza! Porque es un asesino, un enfermizo, un hombre enfermo psicológicamente. ¡Lo sé! Personalmente es un cobarde”
Los comentarios de Chávez surgieron en respuesta a la última Estrategia de Seguridad Nacional del gobierno de Bush, dada a conocer la semana pasada. El documento describía a Chávez como un: “demagogo inundado en dinero del petróleo [que] debilita la democracia y trata de desestabilizar la región”.
En Estados Unidos, US News & World Report reveló que el gobierno de Bush intentó agregar otro componente a su programa de espionaje sin órdenes judiciales en los días posteriores a los atentados del 11 de septiembre: los registros físicos o cacheos. Según la revista, el gobierno de Bush intentó obtener el derecho a llevar a cabo cacheos sin órdenes judiciales esgrimiendo los mismos argumentos que utilizó para el programa de espionaje secreto a nivel nacional. La Casa Blanca alegó que esta facultad le fue otorgada en virtud de la medida del Congreso que autorizaba la utilización de la fuerza para responder a los atentados del 11 de septiembre. Un funcionario del gobierno dijo que el Director del FBI, Robert Mueller, se opuso a los cacheos sin órdenes judiciales, “no sólo por el asunto de responder los ataques sino también por las cuestiones legales y constitucionales suscitadas por los cacheos sin órdenes judiciales”. Thomas Nelson, un abogado de Oregon que representa a un sospechoso de terrorismo dijo que cree que fue sometido a cacheos. Nelson dijo que sus intentos de investigar en virtud de la ley de Libertad de Información han sido rechazados por la Agencia de Seguridad Nacional.
En otras noticias, Knight Ridder informa que una agencia de inteligencia del Pentágono empleó a una empresa contratista vinculada al ex congresista que se encuentra en prisión, Randy “Duke” Cunningham, para vigilar a grupos religiosos, escuelas, y otros lugares en el país. La empresa, MZM Incorporated, fue contratada para proporcionarle apoyo a la Actividad de Campo de Contrainteligencia del Pentágono (CIFA, por sus siglas en inglés). Según el contrato, MZM debía “asistir al gobierno en la identificación y obtención de datos” en mapas, así como también en “aeropuertos, puertos, represas, iglesias/ mezquitas/ sinagogas, escuelas (y) plantas energéticas”. La empresa también recibió tres contratos para proporcionar “servicios de inteligencia” no revelados directamente a la Casa Blanca. MZM quedó envuelta en el extenso escándalo de corrupción de Cunningham cuando se reveló que el fundador de la empresa, Mitchell Wade, perdió 700.000 dólares en la compra de la casa de Cunningham. MZM, que recibió millones de dólares en contratos federales, es el centro de una investigación penal en curso. **
Y en Nueva York, el Departamento de Policía de Nueva York publicó nuevos documentos internos que muestran que comandantes de la policía recomendaron el uso continuo de vigilancia encubierta, operaciones psicológicas y lo que ellos denominaron “arrestos con iniciativa”. Los memorandos se dieron a conocer luego que un juez decretó que eran relevantes para una demanda presentada por 16 personas que fueron arrestadas en una manifestación por los derechos animales frente al Foro Económico Mundial en 2002. Los memorandos incluyen detalles de cómo los oficiales de la policía se infiltraban en reuniones políticas y vigilaban el comportamiento de grupos de acción por la paz. La policía también alentó a los “oficiales encubiertos a distribuir información errónea ente la multitud”, una táctica que se dejó de utilizar hace treinta años.