Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos enviaron una fuerza especial secreta a Jordania para ayudar a responder a la actual violencia en Siria. El New York Times informa que un contingente de más de 150 planificadores y otros especialistas tienen la tarea de ayudar a las fuerzas jordanas a manejar el flujo de refugiados sirios, prepararse para una posible pérdida de control de Siria de sus armas químicas y responder en caso de que el caos en Siria se extienda en Oriente Medio. Se informó que la misión también habló de planes de contingencia para aislar a Jordania del conflicto, y se mencionó una zona de amortiguación con el apoyo de Estados Unidos a lo largo de la frontera siria. La presencia militar estadounidense en Jordania tiene lugar en el momento en que la monarquía de dicho país afronta las mayores protestas desde el comienzo de la Primavera árabe. El viernes, miles de jordanos marcharon en la capital, Ammam, para exigir oportunidades económicas y reformas democráticas.
Turquía obligó a un avión de pasajeros sirio a aterrizar el miércoles y luego confiscó su carga mientras las tensiones entre ambos países continúan en aumento. El avión viajaba de Moscú a la capital siria, Damasco, y hubo información no confirmada de que se hallaron a bordo suministros militares como piezas de armas. Turquía apoyó a los rebeldes que se oponen al régimen de Bashar al-Assad y ha estado en conflicto con su país vecino desde que un ataque de mortero proveniente de siria mató a cinco civiles turcos la semana pasada. Turquía lanzó artillería al otro lado de la frontera y amenazó con responder con más ataques si continúa el fuego sirio.
Los legisladores demócratas y republicanos se enfrentaron el miércoles en la Cámara de Representantes para hablar de las fallas de seguridad previas al asesinato de cuatro miembros del consulado estadounidense en Libia, que tuvo lugar el mes pasado. Los legisladores republicanos acusaron al gobierno de Barack Obama de no proteger adecuadamente el consulado, mientras que los demócratas acusaron a los republicanos de recortar fondos que hubieran servido para costear la seguridad, en cuyo caso, las fallas que ahora critican no existirían. El miércoles, el Departamento de Estado reconoció haber rechazado pedidos de más seguridad en oficinas estadounidenses en Libia en los meses previos al ataque mortal. Un ex funcionario estadounidense en Libia, el Teniente Coronel Andrew Wood, dijo que las operaciones de seguridad en ese país habían sido “débiles”.
Andrew Wood declaró: “La seguridad en Benghazi fue una lucha y continuó siéndolo durante mi período allí. La situación continuó siendo incierta y la información de algunos libios señalaba que estaba empeorando. La seguridad diplomática continuó siendo débil. En abril, hubo tan solo un agente estadounidense de seguridad diplomática allí. El oficial de seguridad regional intentó, con dificultad, obtener más personal allí [en Benghazi], pero nunca logró alcanzar los números que consideraba necesarios”.
La Corte Suprema escuchó los alegatos de una causa en la que se impugna la discriminación inversa en los ingresos universitarios. Una estudiante blanca que dice haber sido rechazada por la Universidad de Texas por ser caucásica interpuso una acción en la que alega ser víctima de discriminación. La impugnación cuestiona un fallo previo que permitía a las universidades públicas tener en cuenta la raza para aumentar la diversidad. El dictamen de 2003 en el caso Grutter contra Bollinger prohibió el uso de sistemas de puntos, pero permitió el uso de métodos menos directos de discriminación inversa. La magistrada Elena Kagan se recusó a sí misma del caso y lo dejó en manos de los otros ocho magistrados. Se prevé que se dicte sentencia el año que viene.
En Yemen, el jefe de seguridad de la embajada de Estados Unidos en Saná fue asesinado. Hoy temprano un atacante desconocido mató a Qassem Aqlani, de nacionalidad yemení, cuando éste iba a trabajar.
Se han realizado concentraciones y vigilias en todo Pakistán en apoyo a una activista de catorce años que aboga por la educación de las niñas y que fue gravemente herida en un ataque planificado contra ella. Malala Yusufzai se dirigía a su casa desde la escuela en un área del noroeste de Pakistán cuando unos militantes detuvieron el vehículo en el que viajaba. Según se informa, un hombre habría preguntado quién era Malalai y luego le disparó en la cabeza y en el cuello. Los talibanes paquistaníes reivindicaron el atentado y dijeron que habían atacado a la víctima porque ésta hablaba en contra de ellos y del “islam y la ley islámica”. Malala ha sido elogiada en todo el mundo por oponerse a los esfuerzos de los talibanes por impedir que las niñas vayan a la escuela. El miércoles, centenares de personas se concentraron en diversas ciudades de Pakistán para condenar el ataque.
Tahia Abdulla manifestó: “No hay nada más cobarde que hombres grandes atacando a una pequeña de catorce años. Lo condeno en los términos más firmes posibles y creo que no hay nada más cobarde que esto”.
Malala estaría estable luego de que la operaran para extraerle una bala del cráneo. El gobierno paquistaní ofreció una recompensa de más de 100.000 dólares por la captura de los autores del ataque.
En Rusia, un tribunal liberó a una de las tres integrantes del grupo punk de protesta Pussy Riot, pero confirmó las condenas de prisión de las otras dos. En un caso que ha concitado la atención internacional, las mujeres fueron halladas culpables de vandalismo motivado por odio religioso luego de hacer una “plegaria punk” en el interior de una catedral exhortando a la Virgen María a deshacerse del líder ruso Vladimir Putin. Yekaterina Samutsevich fue liberada el miércoles luego de que sus abogados alegaran que ella jugó un papel menor en la protesta porque fue expulsada antes de que pudiera sacar la guitarra del estuche. En una audiencia judicial, Jaria Alyokhina, una de las integrantes de Pussy Riot que está presa, se disculpó con los miembros de la Iglesia ofendidos por la acción y dijo que el objetivo de ésta habían sido Putin y las élites rusas.
Maria Alyokhina dijo: “Queridos creyentes, no quisimos insultarlos. Nunca tuvimos esa intención. Fuimos a la catedral a expresar nuestra protesta, nuestra desesperada protesta contra la unión de las élites religiosas y políticas de nuestro país”.
Las otras dos integrantes de Pussy Riot seguirán presas durante dos años más.
Un tribunal federal de apelaciones restableció una ley de Montana que limita las donaciones a las campañas políticas. La ley fue una de varias derogadas en Montana en dictámenes que invocan el histórico fallo de la Corte Suprema en el caso de Citizens United, que habilitó el gasto empresarial ilimitado en las elecciones. Pero esta semana, el Tribunal Federal de Apelaciones del 9º Circuito revocó una impugnación anterior y sostuvo que el juez que derogó la ley debe dar una explicación completa de sus razones para permitir el gasto ilimitado en las campañas políticas.
Hoy se cumplen diez años de la votación del Senado estadounidense que autorizó el uso de la fuerza militar contra Irak y allanó el camino para la invasión de Estados Unidos, que se produjo menos de seis meses después. Entre los que votaron a favor estaban los futuros candidatos presidenciales demócratas John Kerry, Hillary Clinton, John Edwards y Joe Biden. Este último se enfrentará en el día de hoy en un debate de candidatos a la vicepresidencia con otro legislador que también votó a favor de la guerra, el congresista Paul Ryan.