Mientras el fundador de Amazon.com, Jeff Bezos, compra el periódico The Washington Post, analizamos la vida en las fábricas que hacen que empresas online como Amazon.com funcionen. La semana pasada, el presidente Obama emitió un importante discurso sobre el trabajo en un depósito de Amazon ubicado en Chattanooga, Tennessee. Hablamos con la periodista Mac McClelland que se presentó como empleada y la contrataron en un centro logístico sin nombre que emplea el modelo que Amazon ha perfeccionado. La experiencia dio como resultado una nota de tapa en la revista Mother Jones, titulada “I Was a Warehouse Wage Slave: My brief, backbreaking, rage-inducing, low-paying, dildo-packing time inside the online-shipping machine.” (Fui esclava con salario en un depósito: mi breve, agotadora, enfurecedora y mal paga temporada en una empresa online de empaquetamiento y transporte de mercadería).
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