La ONU advierte que se está desatando una crisis de salud en Gaza debido a que gran parte del territorio permanece sin electricidad ni agua corriente y más de 300.000 personas han sido desplazadas. James Rawley, coordinador de asuntos humanitarios de las Naciones Unidas en los Territorios Ocupados, advirtió de un posible brote de enfermedades transmitidas por el agua.
Rawley declaró: “Los servicios esenciales como el agua, el saneamiento y la electricidad prácticamente no funcionan. Están dadas las condiciones para un desastre sanitario y hemos comenzado a hablar con profesionales de la salud acerca de enfermedades que no se han detectado en la Franja de Gaza durante décadas. Me refiero a la fiebre tifoidea, el cólera y otras enfermedades transmitidas por el agua que podrían tener brotes debido a la terrible situación de salud que estamos experimentando”.