En Filipinas, Rodrigo Duterte declaró la victoria en las elecciones presidenciales y prometió redactar nuevamente la Constitución. Duterte ganó las elecciones, a pesar de haber admitido en varias oportunidades su participación en escuadrones de la muerte, de haber bromeado acerca de la violación grupal de una misionera australiana y de haber prometido matar a decenas de miles de personas. Se le ha apodado “el Trump filipino”. Por otra parte, Filipinas ha elegido también por primera vez a un candidato que había declarado públicamente ser transgénero; Geraldine Roman integrará la Cámara de Representantes.
Temas: