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Durante la semana pasada, las manifestaciones contra la violencia policial se extendieron por todo Estados Unidos. Decenas de miles de personas salieron a la calle. Cientos fueron detenidos. Las manifestaciones empezaron tras la muerte por disparos de la policía de Alton Sterling en Baton Rouge, Louisiana, y de Philando Castile en Falcon Heights, Minnesota. Hoy analizamos un aspecto de la historia de Baton Rouge que recibió poca atención, lo que les pasó a las personas que filmaron y distribuyeron los impactantes videos de la muerte de Alton Sterling. En los videos se ve a un agente de la policía de Baton Rouge que sujeta a Sterling mientras este está en el piso, frente a una tienda. Luego le apunta al pecho con un arma y dispara. Uno de los videos fue grabado por Abdullah Muflahi, propietario del minimercado Triple S donde murió Sterling, quien registró el hecho con su propio teléfono celular. Muflahi presentó una demanda contra las autoridades de la ciudad de Baton Rouge, el Departamento de Policía de Baton Rouge y cuatro de sus agentes. En la demanda Muflahi alega que la policía le quitó el teléfono, lo encerró durante horas en un auto de la policía y tomó los registros de la cámara de seguridad de su tienda sin una orden judicial. Además, en la demanda se sostiene que a Muflahi no le permitieron hacer una llamada telefónica a su familia ni a un abogado. Muflahi exige el pago de daños por falso encarcelamiento y el retiro ilegal de propiedad privada, así como por la publicación de las tomas de la cámara de seguridad de su tienda. Hablamos con Abdullah Muflahi y su abogado Joel Porter.
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