Este fin de semana el mundo del deporte profesional en Estados Unidos se vio sacudido por protestas contra el racismo, la brutalidad policial y el presidente Donald Trump. El domingo, los integrantes de la mayoría de los equipos de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL, por su sigla en inglés) se arrodillaron, cruzaron los brazos e incluso no estuvieron presentes cuando se entonó el himno nacional. El domingo también se manifestaron jugadores profesionales de béisbol, jugadoras de la WNBA, animadoras y quienes cantaban el himno nacional. El fin de semana de desafío se produjo después de que Trump criticara a los jugadores que se habían unido a un creciente movimiento de protesta contra la injusticia racial, que fue iniciado por Colin Kaepernick, ex mariscal de campo de los San Francisco 49ers. Estas son declaraciones de Trump en un acto político en Huntsville, Alabama, el viernes por la noche.
El presidente Donald Trump enunció: “Luther y yo y todo el mundo que está esta noche en este estadio estamos unidos por los mismos grandes valores estadounidenses. Estamos orgullosos de nuestro país. Respetamos nuestra bandera. ¿No les encantaría ver a uno de estos dueños de la NFL decir, cuando alguien le falta el respeto a nuestra bandera ‘Saquen a este hijo de perra del estadio ahora mismo. Afuera. Está despedido. ¡Está despedido!?”
Esta mañana Trump tuiteó: “Mucha gente abucheó a los jugadores que se arrodillaron ayer (que eran un pequeño porcentaje del total). ¡Estos son fanáticos que exigen respeto por nuestra Bandera!”. Durante el fin de semana, Trump también atacó a la liga NBA y les retiró la invitación para visitar la Casa Blanca a los integrantes del equipo Golden State Warriors, campeones de baloncesto, después de que el jugador estrella del equipo, Stephen Curry, declarara que no iba a asistir. En respuesta, la superestrella de la NBA LeBron James, uno de los atletas más conocidos de Estados Unidos, tuiteó: “Oye, zángano, ¡Stephen Curry ya dijo que no iba! Por lo tanto, no hay invitación. ¡Visitar la Casa Blanca era un gran honor hasta que apareciste tú!”. Visite democracynow.org/es para ver más información sobre las protestas en el mundo del deporte estadounidense.
En Puerto Rico, el 100% de la isla sigue sin electricidad tras el huracán María. En la región noroeste, 70.000 personas han recibido órdenes de evacuar las áreas cercanas a la represa de Guajataca, que fue dañada por el huracán y está en riesgo de colapsar “en cualquier momento”.
Un habitante de Puerto Rico expresó: “Entonces ayer, llegó una brigada de emergencia que teníamos que desalojar y que la represa había colapsado tenía una grieta de 30 pies algo así y nos mandaron a ver. Realmente pues el agua cuando estaba saliendo, se hizo un cráter bien grande y estaba bien feo, el puente lo destrozó, por eso abrimos una brecha para salir por la otra parte. Y pues realmente no hubo mucha comunicación, fue a lo último que llegaron, no hubo nada. A lo último que nos mandaron a desalojar no pude agarrar nada, realmente no tengo nada, osea todo.
El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Roselló, ha calificado el huracán de la peor catástrofe en la historia de la isla.
Mientras tanto, en México, la cantidad de muertes registradas por el devastador terremoto de magnitud 7,1 que tuvo lugar la semana pasada aumentó a 305, mientras que el sur de México fue sacudido por otros dos terremotos el sábado pasado. Entre los que fallecieron en el terremoto de la semana pasada se encontraban costureras de una fábrica textil, quienes quedaron enterradas cuando la fábrica se derrumbó. Esta es la dirigente de las costureras Gloria Juan Diego Monzón.
Gloria Juan Diego Monzón declaró: “Pues nosotras vemos las mismas condiciones, por eso estamos aquí, porque es el dolor que en este espacio, también como en [la fabrica de] San Antonio Abad, se fueron muchos cuerpos. Se fueron muchos cuerpos en los escombros, como hace 32 años ocultan la verdadera cantidad de cuerpos y de gente fallecida. Pues por eso estamos aquí, porque nosotros seguimos luchando, en nuestros espacios”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó nuevamente con destruir por completo Corea del Norte, un país que tiene 25 millones de habitantes. El sábado, Trump tuiteó: “Acabo de escuchar al ministro de Asuntos Exteriores de Corea del Norte hablando en la Organización de las Naciones Unidas. Si repite los pensamientos del pequeño hombre cohete ¡no estarán en este mundo por mucho más tiempo!”. El tuit de Trump se produjo después de que el ministro norcoreano de Relaciones Exteriores, Ri Yong-ho, dijera que Trump se había embarcado en una “misión suicida”.
Ri Yong-ho enunció: “Debido a su falta de cultura general básica y opinión propia, intentó insultar la suprema dignidad de mi país al referirse a ella como un cohete. Al hacerlo, sin embargo, cometió un error irreversible, y esto hace que la visita de nuestros cohetes a todo el territorio continental de Estados Unidos sea cada vez más inevitable. Nadie más que el propio Trump está en una misión suicida. En caso de que se pierdan vidas inocentes de Estados Unidos debido a este ataque suicida, Trump será totalmente responsable”.
El sábado, decenas de miles de norcoreanos se congregaron en Pyongyang para manifestarse en contra de la agresión militar estadounidense.
El gobierno encabezado por el presidente Donald Trump emitió una nueva orden ejecutiva que extiende la prohibición de viajar a Estados Unidos a personas provenientes de República de Chad y Corea del Norte, así como a algunos funcionarios gubernamentales de Venezuela. La nueva orden también incluye algunas restricciones a los ciudadanos de Irak, así como a todos los ciudadanos de Irán, Libia, Siria, Yemen y Somalia. Esta orden ejecutiva tendría vigencia a partir del 18 de octubre y es aún más extensa que la prohibición original emitida por Trump, que provocó protestas generalizadas en aeropuertos de todo el país y ha sido bloqueada por varios tribunales.
En el Capitolio en Washington DC, los legisladores republicanos se esfuerzan por salvar su último intento de revocar y reemplazar la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio, cuando parece que, una vez más, no volverán a obtener votos suficientes para aprobar la legislación. El viernes, el senador republicano de Arizona John McCain anunció que no iba a respaldar el proyecto de ley Graham-Cassidy. El senador de Kentucky Rand Paul también se opone a la legislación, y la senadora de Maine Susan Collins, la senadora de Alaska Lisa Murkowski y el senador de Texas Ted Cruz indicaron que podrían votar en contra del proyecto de ley. Importantes políticos republicanos han hecho agregados a la legislación, que incluyen beneficios adicionales para Alaska y Maine, para intentar convencer a las senadoras Murkowski y Collins de votar a favor.
En Alemania, la canciller Angela Merkel obtuvo su cuarto mandato en las elecciones del domingo, aunque su victoria se vio eclipsada por la ola de apoyo al partido de extrema derecha Alternativa para Alemania. El partido xenófobo y antiinmigrantes obtuvo el 13% de los votos y se convirtió en el primer partido de extrema derecha en ingresar al Parlamento alemán en más de 60 años.
Por otra parte, continúan en aumento las tensiones por el referéndum sobre la independencia de Cataluña, que se llevará a cabo el próximo 1 de octubre. El gobierno español ha intentado tomar el control de la policía de Cataluña, aunque los jefes de la policía catalana rechazaron esta medida. También durante el fin de semana, los organizadores del referéndum distribuyeron un millón de papeletas de votación antes de las elecciones del domingo.
En el norte de Irak, los votantes acuden hoy a las urnas para un referéndum en el que se decidirá la independencia kurda. Los gobiernos de Irak e Irán han tomado represalias contra el referéndum. Irán detuvo los vuelos hacia y desde las regiones semiautónomas kurdas y lanzó ejercicios de guerra en la frontera kurda. Irak también reforzó su control sobre las fronteras de la región e instó a otros países a dejar de importar petróleo de las áreas kurdas.
El Pentágono afirma haber lanzado seis ataques con aviones no tripulados contra Libia el pasado domingo, habiéndole provocado la muerte al menos a 17 personas. El Pentágono describe la ofensiva como un ataque contra un campamento de entrenamiento del autoproclamado Estado Islámico (ISIS) y afirmó que las 17 víctimas eran milicianos de esa organización. Es la primera vez que Estados Unidos lanza ataques aéreos contra Libia desde que el presidente Donald Trump asumió el poder.
En Turquía, la periodista sirio-estadounidense Halla Barakat y su madre, Orouba Barakat, activista de la oposición en Siria, fueron asesinadas en la ciudad de Estambul. Sus cuerpos fueron hallados en su apartamento el jueves por la noche. Halla trabajaba con el medio de la oposición Orient TV. Su madre, Orouba, era integrante del grupo de oposición política Coalición Nacional Siria. Sus familiares creen que el régimen sirio es responsable de los asesinatos.
En Francia, los trabajadores sindicalizados bloquearon el acceso a depósitos de combustible en todo el país, en medio de una creciente resistencia a las nuevas leyes que van en contra de los trabajadores, firmadas el viernes por el presidente francés, Emmanuel Macron. Las leyes contienen los mayores cambios en el mercado laboral francés en décadas e incluyen un empoderamiento radical de las corporaciones a expensas de los trabajadores, como una reducción de los derechos de negociación colectiva y la limitación de la capacidad de los trabajadores para obtener compensaciones por despidos injustos. El sábado, decenas de miles de personas en París protestaron por las nuevas leyes. Este es el político de izquierda Jean-Luc Mélenchon.
Jean-Luc Mélenchon expresó: “Ahora nos dicen que la democracia no ocurre en las calles. Señor presidente, tendrá que echar un vistazo a la historia francesa para saber que fue en las calles donde se derrocó al rey y donde se derrotó a los nazis”.
En más noticias de Estados Unidos, al menos 22 personas fueron arrestadas el sábado en Saint Louis durante una manifestación por la absolución del ex oficial de policía blanco Jason Stockley en el asesinato del afroestadounidense Anthony Lamar Smith, de 24 años de edad. La del sábado en el centro comercial St. Louis Galleria fue la más reciente de una serie de protestas en contra de la absolución del oficial de policía a principios de este mes.
Y en Washington DC, estudiantes de la universidad de Howard, una institución históricamente negra, interrumpieron el viernes pasado un discurso del ex director del FBI James Comey, cuya temática trataba de los esfuerzos del FBI para socavar la resistencia de los afroestadounidenses a la brutalidad policial.
Los estudiantes de Howard corearon: “No nos moverán. No nos moverán. No nos moverán”.