En Siria, miles de civiles siguen huyendo de la escalada de los combates en la provincia noroccidental de Idlib, donde las fuerzas sirias y rusas han lanzado una ofensiva total con el objetivo de capturar uno de los últimos territorios de Siria en manos de los rebeldes. Esto fue lo que dijo Mohammad Ajaj, uno de las decenas de miles de civiles que han sido desplazados a campamentos de refugiados superpoblados.
Mohammad Ajaj manifestó: “Vinimos de Kafr Roma por los bombardeos a este campamento. Apenas sobrevivimos en este campamento, porque está lleno de barro. La gente está sufriendo por el frío. Que Dios nos ayude”.
En más noticias sobre Siria, un alto asesor del líder sirio Bashar al-Assad advierte de posibles “operaciones” contra los soldados estadounidenses apostados en el este de Siria para vigilar los yacimientos de petróleo. El asesor dijo que Estados Unidos “no tiene derecho” al petróleo y acusó a Donald Trump de intentar robarlo.
En octubre, Trump retiró abruptamente a los soldados estadounidenses de partes del norte de Siria, allanando el camino para una ofensiva turca contra los sirios kurdos, y luego restableció a las tropas estadounidenses en el este de Siria, diciendo: “Queremos conservar el petróleo”.