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Estados Unidos y el Reino Unido enfrentan críticas de la comunidad internacional por pretender aumentar sus arsenales nucleares, lo que va en contra del creciente movimiento internacional a favor del desarme nuclear. Estados Unidos prevé gastar cien mil millones de dólares para desarrollar un nuevo misil nuclear que podría desplazarse cerca de siete mil kilómetros con una ojiva veinte veces más fuerte que la lanzada sobre Hiroshima. Por su parte, el primer ministro británico Boris Johnson acaba de anunciar que planea habilitar un aumento del arsenal nuclear del país, medida que pone fin a tres décadas de desarme nuclear gradual en el Reino Unido. “Observamos una reacción conjunta y uniforme de los países que tienen armas nucleares que va en contra de lo que el resto del mundo está pidiendo, que es la eliminación total de las armas nucleares”, dice Alicia Sanders -Zakre, coordinadora de políticas e investigación de la Campaña Internacional para la Abolición de las Armas Nucleares.
Para conocer más sobre este tema; vea (en inglés) la conversación que tuvimos con Alicia Sanders-Zakre.