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El supremacista blanco que mató a diez personas en Búfalo, Nueva York, accedió a comprar un rifle de asalto a pesar de que, pocos meses atrás, la policía del estado lo había detenido por amenazar con cometer actos de violencia. El dueño de la tienda que le vendió el arma dice que cuando hizo la verificación, apareció que el joven no tenía antecedentes. Analizamos por qué la verificación de antecedentes por sí sola no parece ser suficiente para prevenir la violencia con armas de fuego, así como el aumento drástico que se registra en los últimos años tanto en este tipo de ataques como en la venta de armas, frente a la falta de nuevas leyes a nivel federal. Varios proyectos de ley que proponen restricciones más severas al acceso a las armas, han sido bloqueados en el Congreso con tácticas obstruccionistas. “Exigimos que se renueve la prohibición de la venta de armas de asalto a nivel federal y también que se restrinja la producción de cargadores de gran capacidad”, dice Kris Brown, presidente de Brady, una de las organizaciones más antiguas de prevención de la violencia con armas de fuego de Estados Unidos.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que mantuvimos con Kris Brown.