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Agentes de policía y un grupo de motociclistas de Uvalde, Texas, están impidiendo a un número creciente de periodistas informar sobre las repercusiones del tiroteo masivo perpetrado en la escuela primaria Robb, en el que murieron 19 estudiantes de cuarto grado y dos maestras. “Nadie aquí recuerda haber sido tratado de esta manera ni que se nos haya impedido hacer nuestro trabajo de esta manera”, dice Nora López, editora ejecutiva del periódico San Antonio Express-News y presidenta de la Asociación Nacional de Periodistas Hispanos. “Recabar información es un derecho constitucional, por lo que en algún momento esto se convertirá claramente en represión oficial”, afirma López. Además, la periodista dice que la población local tiene miedo de hablar con la prensa, luego que la madre de dos estudiantes de la escuela Robb informara que la policía la había amenazado con detenerla si relataba a los medios cómo había tratado de ingresar a la escuela para tratar de salvar a sus hijos.
Para conocer más sobre este tema, vea (en inglés) la conversación que tuvimos con Nora López.
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