
El lunes 24 de marzo, dos periodistas palestinos murieron en ataques israelíes: Hossam Shabat, del medio Al Jazeera, quien tenía 23 años de edad, y Mohammed Mansour, del medio Palestine Today, a quien mataron en su apartamento junto a su esposa. Con esto, ascienden a 206 las muertes de periodistas a manos de Israel en Gaza durante el último año y medio. Justo antes de su muerte, Shabat había compartido en las redes sociales la noticia de la muerte de Mansour y había publicado un artículo en el medio Drop Site News, en el cual describía la campaña de tierra arrasada que Israel ha implementado en Beit Hanoun, su ciudad natal. Hablamos con su editor, Sharif Abdel Kouddous, quien recuerda a Shabat como una “persona cálida y divertida”, dedicada a su trabajo y su comunidad. En los últimos meses, venía siendo objeto de una creciente vigilancia por parte del ejército israelí, que lo calificaba de terrorista y lo había incluido en una “lista negra”. A pesar de que “lo tenían en la mira y lo estaban persiguiendo abiertamente”, Shabat “de todos modos continuó cubriendo el genocidio de su pueblo”.
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Transcripción
AMY GOODMAN: Esto es Democracy Now!, democracynow.org, el informativo de guerra y paz. Soy Amy Goodman.
Pasamos ahora a hablar de Gaza, donde Israel ha matado al menos a 23 palestinos en ataques antes del amanecer este 25 de marzo, entre ellos siete niños. Israel ha matado a más de 700 palestinos, incluidos más de 270 niños, durante la última semana desde que ese país rompió el alto el fuego con Hamás. Hay informes de que Israel está considerando una invasión terrestre de Gaza a gran escala para volver a ocupar todo el territorio. Israel ha matado ya a más de 50.000 palestinos en la Franja, aunque se espera que la cifra real sea mucho mayor.
El 24 de marzo, los ataques israelíes mataron a dos periodistas palestinos: Mohammed Mansour y Hossam Shabat. Según el Sindicato de Periodistas Palestinos, Israel ha matado a 206 periodistas en Gaza desde octubre de 2023.
Mohammed Mansour trabajaba para Palestine Today TV, que tiene su sede en Beirut. Mansour murió en un ataque aéreo israelí en su casa en Jan Yunis.
Poco después, un bombardeo israelí mató a Hossam Shabat mientras estaba en su auto en Beit Lahia. Shabat trabajaba para Al Jazeera y también escribía para el sitio web de noticias Drop Site. En octubre, el ejército israelí lo incluyó a él y a otros cinco periodistas palestinos en una “lista de objetivos”. Horas antes de su muerte, envió su último artículo para Drop Site. En él describe la reanudación de la campaña de tierra arrasada de Israel en su ciudad natal de Beit Hanoun.
En un momento, nos acompañará el editor de Hossam Shabat en Drop Site, Sharif Abdel Kouddous. Pero primero escuchemos a Hossam en sus propias palabras.
REPORTERO: ¿No temes por tu vida?
HOSSAM SHABAT: Mientras haya masacres y bombardeos, ¿deberíamos parar? ¿Tú qué crees?
REPORTERO: Entonces, a pesar de las masacres, ¿vas a seguir?
HOSSAM SHABAT: Hay masacres y bombardeos, así que debemos seguir cubriéndolos y difundiendo la verdad. Los ocupantes israelíes están determinados a perseguir a los periodistas para evitar que expongan sus crímenes. Ayer, los horrores de la masacre causaron daño a todos y perturbaron a las fuerzas de ocupación israelíes. Es por eso que emitieron amenazas contra Anas Al-Sharif y varios periodistas más. Pero la cobertura continuará, si Dios quiere.
AMY GOODMAN: Esas fueron las palabras del periodista palestino de 23 años Hossam Shabat, que murió en un ataque aéreo israelí el lunes 24 de marzo.
Tras su muerte, los amigos de Shabat publicaron un mensaje que él mismo había escrito. El mensaje comienza así: “Si estás leyendo esto, significa que me han matado —muy probablemente de forma deliberada— las fuerzas de ocupación israelíes. […] Durante los últimos 18 meses, he dedicado cada momento de mi vida a mi pueblo. Documenté los horrores en el norte de Gaza minuto a minuto, con la determinación de mostrarle al mundo la verdad que trataron de enterrar. Dormí en las aceras, en las escuelas, en tiendas de campaña, en cualquier lugar que pudiera. Cada día era una batalla por sobrevivir. Soporté el hambre durante meses, sin embargo, nunca abandoné a mi pueblo”. Esas eran las palabras del periodista palestino Hossam Shabat.
Nos acompaña ahora Sharif Abdel Kouddous, el galardonado periodista y editor de Drop Site News, que trabajó estrechamente con Hossam Shabat, editando y traduciendo sus artículos al inglés. Sharif acaba de ganar un Premio de Periodismo Televisivo RTS y un Premio Overseas Press Club por su documental “La noche interminable” (The Night Won’t End) para el programa Fault Lines de Al Jazeera. Vamos a hablar sobre eso en un momento. Pero primero hablemos de su colega Hossam. Háblenos de él, Sharif.
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Una tremenda pérdida. Hossam era un periodista increíble, tenía 23 años, era de Beit Hanoun, y fue uno de los pocos periodistas que permanecieron en el norte durante los 17 meses de ataques genocidas de Israel. Y su capacidad para cubrir una de las campañas militares más brutales en la historia reciente era simplemente increíble. Él fue testigo de un sufrimiento y cantidad de muertes incalculables casi a diario. Padecía hambre con frecuencia, no tenía suficiente comida. Me dijo que fue desplazado 20 veces. No tenía dónde dormir. Estaba agotado. Y enterró a muchos de sus amigos y muchos de sus colegas periodistas durante ese tiempo. Él mismo resultó herido tras un ataque aéreo israelí. A pesar de todo esto, de alguna manera logró continuar informando implacablemente todos los días.
Y como acaban de mencionar, fue uno de los dos periodistas a los que mataron ayer. Mataron a Mohammed Mansour, de Palestine Today. La última publicación de Hossam en su cuenta de Instagram era una foto del cadáver de Mohammed, informando que otro periodista había sido martirizado. Apenas una hora después, Hossam estaba conduciendo su auto en Beit Lahia y los militares israelíes bombardearon su vehículo. Hay imágenes de su cuerpo tumbado boca abajo en el suelo, ensangrentado. Lo mataron.
Y creo que tenemos que ser muy claros: a Hossam lo mataron de forma deliberada. Fue asesinado por el ejército israelí. El ejército israelí lo ha admitido abiertamente. Lo llamaron terrorista, y dijeron: “No dejen que el chaleco de prensa les engañe”. A esto es a lo que hemos llegado.
Israel tiene un largo historial de matar periodistas, especialmente periodistas palestinos, con impunidad. Pero, con frecuencia, lo que veíamos en el pasado es que o bien negaban ser responsables de sus muertes, o decían que era algún tipo de daño colateral, que no fue algo deliberado, o bien afirmaban que el periodista… lo que empezamos a ver es que decían que el periodista era un terrorista y un miliciano después del hecho. Pero lo que fue diferente esta vez es que Hossam y otros cinco periodistas fueron incluidos en octubre en, esencialmente, una lista de objetivos del ejército israelí, llamándolos milicianos, llamándolos terroristas, y diciendo que iban a matarlos, básicamente. Hossam en ese momento dijo que sentía que estaba siendo perseguido. Y esto es parte de…
AMY GOODMAN: Estaba recibiendo llamadas.
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Estaba recibiendo llamadas. Y el portavoz en árabe del Ejército israelí lo está citando por su nombre, señalando a Anas Al-Sharif y otros periodistas, diciendo: “Los vamos a atrapar”. Por lo tanto, esto es algo nuevo, esta forma de atacarlos de manera preventiva y sin negarlo.
Y creo que es vergonzoso, y es vergonzosa la respuesta silenciosa de las instituciones mediáticas occidentales. Estos a quienes están matando son nuestros colegas. Están siendo atacados y perseguidos abiertamente por el ejército israelí. Y este silencio fue algo que también enojó a Hossam. Cuando mataron a cinco periodistas en un ataque aéreo israelí en diciembre, le envié un mensaje a Hossam, solo para ver cómo estaba, y él respondió: “Nuestro trabajo es solo morir. Odio este mundo. Nadie está haciendo nada. Te juro que he llegado a odiar este trabajo”. Y él mismo sabía que lo más probable es que lo acabaran matando, porque estaba siendo perseguido de esta manera. Él continuó, sin embargo, cubriendo el genocidio de su pueblo.
Y como acaban de mencionar, hablamos de un joven de 23 años que escribió una carta sabiendo que sería publicada después de su muerte, y que comienza diciendo: “Si estás leyendo esto, significa que me han matado —muy probablemente de forma deliberada— las fuerzas de ocupación israelíes”. Y termina con estas palabras, que creo que son importantes: “Te pido ahora: no dejes de hablar de Gaza. No dejes que el mundo mire hacia otro lado. Sigue luchando, sigue contando nuestras historias… hasta que Palestina sea libre”. Y ahora nos toca a todos nosotros hacer precisamente eso. No olvidaremos a Hossam. No dejaremos que el mundo mire hacia otro lado.
AMY GOODMAN: Sharif, usted produjo el galardonado documental de Al Jazeera “El homicidio de Shireen Abu Akleh” (The Killing of Shireen Abu Akleh). Ella era palestina-estadounidense. ¿Qué tipo de respuesta —y, por supuesto, Estados Unidos está financiando y armando al Ejército israelí— se obtuvo del… la vimos muerta. Usted analizó, con Forensic Architecture, lo que le sucedió exactamente, cuando un francotirador israelí mató a Shireen, un rostro muy conocido de Al Jazeera Arabic, el 11 de mayo de 2022. Incluso el senador Van Hollen llegó a exigir una investigación pública. ¿Pero?
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Sí, Estados Unidos esencialmente aceptó la narrativa israelí de lo que sucedió, que llegó después de mucha presión. Inicialmente negaron que habían matado a Shireen Abu Akleh, culparon a un miliciano palestino, afirmación que fue fácilmente desacreditada. Y luego finalmente admitieron, bajo mucha presión, que probablemente la mataron ellos, pero que se debió a que quedó atrapada en el fuego cruzado, aunque esa afirmación contradice directamente las imágenes de video y los testimonios de testigos presenciales. Pero Estados Unidos esencialmente adoptó esa narrativa. Y no debería importar el hecho de que tenía ciudadanía estadounidense, pero eso hacía a EE.UU. responsable de lo que le ocurriera. Incluso el entonces presidente Biden se negó a reunirse con la familia de Shireen Abu Akleh. Se reunió con la familia de Austin Tice, se reunió con la familia de Evan Gershkovich, y de otros periodistas estadounidenses que habían desaparecido o estaban en prisión. Pero se negó a reunirse con la familia de una periodista estadounidense a la que habían matado.
Pero, para volver a Hossam, no lo sé. Yo creo que… Él me estaba mandando mensajes literalmente horas antes de que esto sucediera. Siempre estaba ansioso por publicar sus reportes. Habíamos acordado que escribiría este artículo sobre lo que presenció cuando Israel reanudó su campaña de tierra quemada en Beit Hanoun, de donde él era oriundo. Él regresó allí, como mucha gente, después del supuesto alto el fuego; más de medio millón de personas regresaron al norte, donde estaba Hossam. Pero él pudo ir a Beit Hanoun, y estaba allí cuando, hace exactamente una semana, Israel llevó a cabo uno de los más brutales y feroces bombardeos aéreos en 17 meses de ataques genocidas, matando, creo, a más de 200 niños en cuestión de horas. Doscientos niños en cuestión de horas. Y el artículo de Hossam hablaba de lo que presenció ese día. Voy a leer algo de lo que traduje ayer, lo traduje en medio de las lágrimas porque lo acababan de matar. Él termina el artículo diciendo: “No hay justificación para esto. Todo está siendo aplastado: la vida de personas inocentes, su dignidad, y sus esperanzas de un futuro mejor”.
AMY GOODMAN: Quiero hacer referencia a lo que nuestro colega Jeremy Scahill de Drop Site News publicó en las redes sociales, un video acompañado de las palabras “Esta es la persona que Israel asesinó hoy. Nuestro colega Hossam Shabat”. En el video, una niña saluda a Hossam en su auto y le dice que temía que lo hubieran matado y que él era su inspiración para convertirse en periodista en el futuro.
NIÑA PALESTINA: Te juro que te extrañé. Dijeron que habías sido martirizado.
HOSSAM SHABAT: ¿Por qué?
NIÑA PALESTINA: ¿Qué quieres decir con “por qué”? ¡Cuando la ocupación entró en el norte!
HOSSAM SHABAT: ¿Sí?
NIÑA PALESTINA: Estábamos a punto de llorarte, hombre. Lo juro.
HOSSAM SHABAT: ¿Así de grave?
NIÑA PALESTINA: Te extrañamos. ¿Qué crees? ¿Que no hay más dios que Alá? Lo juro por Dios que vine a verte.
HOSSAM SHABAT: ¿Entonces nos extrañaste?
NIÑA PALESTINA: Te lo juro por Dios Todopoderoso que vine a verte.
HOSSAM SHABAT: ¡Eres una verdadera campeona! ¿Qué quieres ser cuando seas grande?
NIÑA PALESTINA: Te juro que los extrañé.
HOSSAM SHABAT: ¿Por qué dices “martirizado” entonces?
NIÑA PALESTINA: ¡Una periodista! Y estaba pensando: “¿Cómo se supone que voy a convertirme en periodista si martirizan a Hossam Shabat?”.
HOSSAM SHABAT: Te haremos periodista, si Dios quiere.
NIÑA PALESTINA: ¿Cómo voy a lograr ser periodista entonces?
HOSSAM SHABAT: ¿Quieres ser periodista? Si Dios quiere, te convertirás en una.
AMY GOODMAN: “Quiero ser periodista. ¿Cómo puedo convertirme en periodista?”.
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Sí, él era una persona muy cariñosa y también graciosa. En los frecuentes mensajes y notas de voz que intercambiábamos, a pesar de toda la muerte y la violencia a su alrededor, de alguna manera todavía lograba ser cordial. Y creo que eso fue una forma de rebelión contra todo lo que estaba sucediendo a su alrededor, mantener esta actitud.
Y como dije, es uno de los más de 200 periodistas a quienes han matado. Este es un número sin precedentes de muertes de periodistas. Y los periodistas que están vivos, [por ejemplo], otro colaborador de Drop Site, Abubaker Abed, que ha estado en Democracy Now! muchas veces… Recordemos que Israel ha impuesto un bloqueo total a Gaza desde el 2 de marzo. Así que por más de tres semanas no ha entrado un solo camión de comida, ni medicamentos ni combustible…
AMY GOODMAN: Incluso antes de los bombardeos, ya habían impuesto este bloqueo.
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Sí. Esto es una imposición reiterada de una situación de hambruna. Abubaker tiene 22 años. Está padeciendo desnutrición. El otro día me envió un mensaje y dijo que está completamente agotado. No puede levantarse de la cama. Tiene mucho dolor. Le duele el cuerpo. Necesita multivitaminas reforzadas y otras medicinas. Estamos tratando de hacérselas llegar. He estado hablando con médicos que conocemos en Gaza, pero dicen que no hay suministros y no pueden conseguir nada para él.
Otra periodista que también escribe para Drop Site, Rasha Abou Jalal, casi muere la semana pasada en un bombardeo del ejército israelí. Ella está en la ciudad de Gaza, es una de las muchas personas que regresaron al norte. Bombardearon la casa justo al lado de la suya. La pared se derrumbó sobre la habitación donde suele dormir con su esposo y sus cinco hijos, pero ese día estaban durmiendo en la habitación de al lado porque era más cálida. Y de alguna forma sobrevivieron, milagrosamente, aunque once personas murieron, sus vecinos, incluida una niña de 8 años.
AMY GOODMAN: Quiero mostrar un video de Abubaker Abed hablando en Democracy Now! hace solo un par de semanas.
ABUBAKER ABED: La gente aún no se ha recuperado del trauma interminable por el que han pasado durante los últimos 15 meses. No hemos tenido respiro frente a nuestro sufrimiento. Y esto ha sucedido de repente. Nos despertaron abruptamente. No podíamos entender en realidad lo que estaba sucediendo. Estoy temblando, literalmente, mientras hablo con usted.
La gente tiene que entender que la población de Gaza no puede soportar un segundo más de esta guerra. Esto es indiscriminado, insoportable, implacable, inconcebible. No sé qué más, qué otras palabras puedo usar para describir las escenas que vemos en este momento.
La gente no sabe que ahora mismo tenemos un encarecimiento de los precios y una escasez de alimentos. No saben que hay gente que ha pasado sus días, las últimas 24 horas, sin una sola comida. Conozco familias que [inaudible]. Y, en mi caso personal, acabé de comer un poco de pan con algo de queso. Los precios son insólitos.
Todo lo que sucede ahora mismo es completamente inconcebible. Es simplemente… Solo escuchas a tus vecinos gritando de dolor. Ese tipo de gritos y de múltiples bombardeos que han sucedido en estos días solo han reavivado muchos recuerdos dolorosos de lo que he vivido y lo que he soportado los últimos 15 meses.
AMY GOODMAN: Ese es Abubaker Abed, hablando en Democracy Now! Tiene 22 años. Y cuando lo mostramos en video —lo hemos visto ahora mismo— vemos que está cada vez más y más delgado. Yo estaba con usted el domingo, Sharif, cuando recibió esos mensajes donde él le dijo que le dolía todo el cuerpo.
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Sí, está sufriendo lo que millones de palestinos en Gaza están sufriendo a causa del asedio. Y el Ministerio de Salud acaba de publicar, por cierto, un informe de más de mil páginas con los nombres, edades y números de identificación de más de 50.000 palestinos cuyas muertes han sido confirmadas. Y son solo los que han pasado por hospitales públicos, 50.000 palestinos. Hay 400 páginas que son solo nombres de niños. En las primeras 27 páginas, las edades son de cero, porque esas son personas, niños, bebés, menores de 1 año a los que mataron.
AMY GOODMAN: Sharif, usted y su equipo de Al Jazeera acaban de ganar dos importantes premios para documentales: el premio RTS (Royal Television Society), el cual usted recibió en Londres, y luego el premio del Overseas Press Club, el cual es muy codiciado, por su documental sobre Gaza, “La noche interminable”. ¿Puede decirnos de dónde viene el nombre del documental y también hablar sobre algo que usted mencionó hace poco en Democracy Now!, con relación a lo mucho que depende de periodistas palestinos en Gaza para traernos las imágenes de lo que está pasando allí? Recordemos que Israel prohibió a los periodistas occidentales entrar en Gaza.
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Sí, estos premios dan testimonio del trabajo de los periodistas en Gaza que realmente hicieron posible ese documental. Ellos son quienes filmaron todo en Gaza. Hicieron las entrevistas. De hecho, el premio del Overseas Press Club hace referencia a las tomas cinematográficas del documental. Así que este premio es un reconocimiento para ellos.
Debo decir algo sobre el premio de la Royal Television Society. En la ceremonia de entrega de los premios en Londres a principios de este mes, se suponía que debían presentar un premio especial en honor a los periodistas palestinos en Gaza. Ese premio fue cancelado a último minuto —yo no lo sabía en ese momento— porque decían que no querían echar más leña al fuego en relación con un documental de la BBC, titulado “Gaza: cómo sobrevivir a una zona de guerra” (Gaza: How to Survive a Warzone), porque el padre del niño que lo narra fue una vez ministro de Hamás. Entonces, en lugar de denunciar a la BBC…
AMY GOODMAN: Y la BBC lo canceló…
SHARIF ABDEL KOUDDOUS: Sí, eliminó el documental. Y, en lugar de denunciar a la BBC por decidir eso bajo presión, sobre un documental de niños que sobreviven a un genocidio y lo narran, la RTS retiró el premio que homenajeaba a los periodistas palestinos porque era una especie de “pelota de fútbol política”. Pero esto causó indignación y más de 400 periodistas y trabajadores de los medios firmaron una carta rechazando la medida. Y de hecho, hoy van a restablecer ese premio en Londres para los periodistas palestinos, que merecen todo nuestro apoyo. Y tenemos que luchar por ellos para que se haga justicia, porque los están matando a un ritmo sin precedentes.
AMY GOODMAN: Sharif, quiero agradecerle por todo el trabajo que realiza para amplificar las voces y los reportes de la población en Gaza. Sharif Abdel Kouddous, periodista galardonado, editor de Drop Site News, miembro del equipo que produjo el documental de Fault Lines “La noche interminable” para Al Jazeera en inglés.
Traducido y editado por Igor Moreno Unanua e Iván Hincapié.