Un tribunal federal de apelaciones dictaminó que las grandes empresas estadounidenses ya no pueden ser demandadas por violaciones a los derechos humanos cometidas en el extranjero en virtud de la ley sobre indemnización civil por daños extracontractuales causados a extranjeros (en inglés “Alien Tort Claims Act”, o ACTA), que tiene larga data. A principios de este mes, el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito de Estados Unidos falló que las demandas por daños extracontractuales cometidos contra extranjeros sólo pueden presentarse contra personas y no contra empresas. El fallo desestimó una demanda en la que se acusaba a la gigante petrolera Royal Dutch Shell de complicidad en el asesinato y tortura de activistas nigerianos, entre los que se encontraba Ken Saro-Wiwa. En una opinión en minoría, el Juez del Segundo Circuito Pierre Leval criticó la sentencia y expresó: “La opinión en mayoría asestó un fuerte golpe al Derecho internacional y su propósito de proteger los derechos humanos fundamentales… En la medida en que se constituyan como sociedad, las empresas tendrán libertad para traficar o explotar esclavos, contratar ejércitos mercenarios para que hagan el trabajo sucio para déspotas, perpetren genocidios, dirijan prisiones donde se torture a los opositores políticos de los dictadores o se dediquen a la piratería, todo sin responsabilidad civil ante las víctimas”.
Un tribunal federal de apelaciones emitió una orden provisional que restablece el financiamiento gubernamental de las investigaciones con células madre embrionarias. El martes, el Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia dispuso el aplazamiento de una medida cautelar dictada por un tribunal inferior que bloqueó la revocación dispuesta por el gobierno de Barack Obama de las restricciones al financiamiento de las células madre impuestas en la era de George W. Bush. El tribunal inferior había dictaminado que el financiamiento infringe una ley de 1996 que prohíbe la utilización de fondos federales para cualquier investigación que implique la destrucción de embriones humanos o represente una amenaza para ellos. El financiamiento será restablecido provisionalmente hasta que se resuelva la apelación presentada por el gobierno.
En Irak, un soldado estadounidense se encuentra bajo custodia luego de que presuntamente disparó y asesinó a otros dos soldados e hirió a un tercero en Faluya la semana pasada. Las Fuerzas Armadas dicen que los soldados participaron de un “altercado verbal” que derivó en violencia.
Los pasajeros de un barco de ayuda israelí al que se le impidió llegar a Gaza acusan a las Fuerzas Armadas israelíes de haber hecho un uso excesivo de la fuerza al capturar el buque. El martes, ocho de los nueve activistas a bordo del barco judío Irene que se dirigía a Gaza fueron liberados tras haber sido aprendidos a millas de la costa de su destino. Intentaban entregar un cargamento humanitario simbólico para romper el sitio israelí de la Franja de Gaza. El activista israelí y ex piloto de la Fuerza Aérea de su país Yonatan Shapira dijo que lo habían golpeado y le habían aplicado descargas con una pistola taser.
Shapira declaró: “Los soldados nos dieron un trato brutal, no nos mataron como mataron a otros palestinos y musulmanes, pero su trato fue brutal. Me dieron choques eléctricos con una pistola taser y fui brutamente maltratado, al igual que mi hermano Itamar. Nos detuvieron con mucha violencia y ahora que nos liberaron [las autoridades israelíes] nos culpan, nos acusan de haber atacado y amenazado a los soldados y, obviamente, fue todo al revés, es una absoluta mentira”.
Entre los demás pasajeros se encontraba el sobreviviente del Holocausto y residente en Israel Reuven Moskovitz, de 82 años, que cuando era niño vivió en Rumania en el período de la ocupación nazi.
Moskovitz dijo: “Estamos hablando de un millón y medio de personas, de 800.000 niños. Cuando era niño, estuve preso durante cinco años y no lo puedo olvidar. No puedo dormir de noche, tengo pesadillas que me han perseguido toda mi vida. ¿Saben lo que le estamos haciendo a esta gente [en Gaza] y lo que les estamos haciendo a nuestros soldados?”.
El barco judío a Gaza fue el último intento de romper el bloqueo desde el ataque letal perpetrado en mayo por Israel contra una flotilla de ayuda. Mientras tanto, un convoy de unos 45 vehículos con ayuda procedente de Europa llegó a Turquía en su camino a Gaza. El convoy, apodado “Viva Palestina”, intentará llegar a Gaza el mes que viene. El activista británico Patrick Audai dijo que el ataque de Israel contra la flotilla lo había motivado a participar.
Audai declaró: “Vi lo que esos terroristas israelíes le hicieron a los activistas inocentes a bordo del 'Mavi Marmara' y a esa gente que murió, que son héroes, son la conciencia del mundo. Fue ahí que tomé la decisión de expresar mi oposición y de ir a Gaza a llevar ayuda médica para aliviar el terrible sufrimiento que padece su pueblo”.
Pakistán advierte que dejará de proteger las rutas de suministro de la OTAN a Afganistán si Estados Unidos sigue realizando ataques a través de la frontera. Más de 70 presuntos militantes fueron asesinados en ataques recientes llevados a cabo por helicópteros estadounidenses Apache que cruzan la frontera desde Afganistán. Según Associated Press, funcionarios paquistaníes dijeron a los líderes de la OTAN en Bruselas que no tolerarán ataques de naves tripuladas. Aproximadamente el 80% de los suministros no letales de la OTAN en Afganistán son entregados a través de Pakistán.
En otras noticias de Pakistán, miles de personas protestaron en Karachi el martes contra la sentencia de la neurocientífica paquistaní Aafia Siddiqui en un tribunal estadounidense. Siddiqui fue condenada la semana pasada a 86 años de prisión por dispararle a los interrogadores estadounidenses mientras se encontraba encarcelada en Afganistán. Su condena y sentencia han sido muy criticadas en Pakistán, donde se cree que Siddiqui es inocente y fue maltratada cuando estuvo detenida por Estados Unidos. El líder político paquistaní Farooq Sattar pidió la repatriación de Siddiqui.
Sattar dijo: “Es necesario que haya una revisión y que el Presidente Obama y el gobierno estadounidense intervengan, deben retirar de inmediato los procesos en contra Aafia Siddiqui. Deben declarar nula la sentencia y ordenar la liberación de Aafia Siddiqui. Y ella debe ser enviada de regreso a casa incondicionalmente, honradamente. Debería ser absuelta”.
El senador republicano Tom Coburn fue identificado como el legislador responsable de retrasar más de 900 millones de dólares en ayuda a Haití aprobada por el Congreso. Un pedido adicional para la reconstrucción de Haití fue aprobado por el Senado en mayo y luego en la Cámara de Representantes en julio. Pero una medida para instruir cómo debía ser gastado el dinero quedó paralizada luego de que fue anónimamente pospuesta para una mayor revisión. Associated Press informa que el doctor Coburn suspendió la medida porque le preocupaba una disposición de cinco millones de dólares, que según dice, derrocharía el dinero de los contribuyentes. Estados Unidos aún no ha entregado un centavo de los 1.150 millones de dólares en nueva ayuda para Haití que prometió este año. Al menos seis personas murieron y más de ocho mil toldos y otros refugios temporales quedaron destruidos cuando una tormenta azotó la capital, Puerto Príncipe, la semana pasada.
La destacada senadora colombiana Piedad Córdoba habló sobre su destitución del Senado colombiano y la prohibición de ejercer cargos públicos durante dieciocho años. El Inspector General de Colombia destituyó a Córdoba esta semana por presuntamente ayudar a miembros de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia). Córdoba ha sido una destacada crítica del ex presidente colombiano Álvaro Uribe y de la guerra contra las drogas respaldada por Estados Unidos en Colombia. Sus esfuerzos de mediación han ayudado a liberar rehenes capturados por las FARC. El martes, Córdoba prometió seguir participando en los diálogos con los rebeldes.
La senadora colombiana dijo: “A los secuestrados y secuestradas del mundo, del país, a los retenidos y retenidas por las FARC, tengan la absoluta certeza que esto (…) no me va a intimidar, que no me va a amilanar, que no vamos a dejar solos a las familias, ni solas, y que ellos que me están escuchando en la selva pueden tener la absoluta certeza que, aún si fuese el caso de llegar a la cárcel, desde la cárcel mi voz se levantará soberana y fuerte para insistir en la necesidad de la humanización y también la necesidad de la paz”.
Un nuevo estudio advierte que más de una quinta parte de las especies de plantas del mundo están en peligro de extinción. El Índice de Muestreo de la Lista Roja indica que el 22% de casi cuatro mil especies están en peligro. En más del 80% de los casos, la causa es la pérdida de hábitat inducida por el hombre. Stephen Hopper, de los Jardines Botánicos Reales de Londres, dijo: “No podemos quedarnos cruzados de brazos viendo como desaparecen especies de plantas. Las plantas son la base de toda la vida en la Tierra, proporcionan aire limpio, agua, alimento y combustible. Toda la vida animal y la de las aves depende de ellas, y también la nuestra”.
Y continúan las protestas en todo el país contra las redadas del FBI de ocho casas y oficinas de activistas en contra de la guerra en Minneapolis y Chicago la semana pasada. El martes, cientos de personas se manifestaron en al menos una docena de ciudades, entre ellas Filadelfia, Washington D.C., Los Ángeles y San Francisco. En Nueva York, el activista en contra de la guerra José Martín participó en una manifestación frente a un edificio federal.
José Martín dijo: “Viví en Chicago durante ocho años. Conozco a todas las personas a las que el FBI registró o contactó el viernes pasado. Todos son muy amigos míos, algunos de ellos tienen niños pequeños, algunos de ellos tiene bebés, y los recuerdo antes de que se casaran, en algunos casos. Son personas maravillosas, activistas trabajadores en contra de la guerra, activistas solidarios, y debemos asegurarnos de que nadie, en ningún movimiento, les dé la espalda. Porque eso es lo que el FBI quiere. Quiere arruinarles la vida y quiere hacer que tantos activistas en contra de la guerra como sea posible les den la espalda a las personas que están siendo hostigadas”.
Once activistas recibieron citaciones para comparecer ante grandes jurados federales. La primera comparecencia tendrá lugar la semana que viene.