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Amy Goodman de Democracy Now! ingresó a la embajada de Ecuador en Londres para hacerle una entrevista exclusiva a Julian Assange, fundador de WikiLeaks. Assange pidió asilo político a Ecuador, en cuya embajada está viviendo desde hace más de dos años. Hoy está siendo investigado tanto en Suecia como en Estados Unidos, donde un gran jurado secreto analiza el papel que tuvo WikiLeaks en la publicación de una cantidad de documentos filtrados relacionados a las guerras en Irak y Afganistán, así como de los cables del Departamento de Estado. En la segunda parte de dicha entrevista, Assange responde a los comentarios de la ex secretaria de Estado Hillary Clinton acerca de que el denunciante de la Agencia Nacional de Seguridad, Edward Snowden, debería regresar a Estados Unidos para enfrentar un juicio. “El consejo de todos nuestros abogados es que no debe volver a Estados Unidos. Sería extremadamente insensato si lo hiciera”, afirma Assange. “No es posible que haya un juicio justo porque el gobierno de Estados Unidos tiene antecedentes de aplicar privilegios secretos de Estado para impedir que la defensa use material que es secreto en su favor”.
Transcripción
AMY GOODMAN: Pasamos ahora a la segunda parte de nuestra transmisión en exclusiva para TV y radio. El fin de semana pasado viajamos a la embajada de Ecuador en Londres para entrevistar al fundador y editor de WikiLeaks, Julian Assange. Va para su tercer año dentro de esta embajada donde tiene asilo político. Assange enfrenta investigaciones en Suecia y Estados Unidos. Aquí en EE.UU., un jurado secreto está investigando a WikiLeaks por publicar un valiosa colección de documentos filtrados sobre las guerras de Irak y Afganistán, así como cables del Departamento de Estado. En Suecia, se le busca para interrogarlo bajo la acusación de conducta sexual indebida, aunque no se han presentado cargos. Vamos a la entrevista.
AMY GOODMAN: Esto es Democracy Now!, democracynow.org. el informativo de Guerra y Paz. Soy Amy Goodman. Estamos en la embajada de Ecuador en Londres, donde Julian Assange ha vivido por más de dos años. Él tiene asilo político en Ecuador pero no puede llegar hasta allá porque teme que si llega a salir de la embajada para tomar un avión a Ecuador, el gobierno británico lo arrestará y extraditará a Suecia. Y teme que de Suecia sea extraditado a Estados Unidos para enfrentar cargos contra su organización, WikiLeaks, de la cual es editor. Así, Julian, me gustaría que usted le respondiera a Hillary Clinton, la que fuera secretaria de Estado y que podría ser candidata a la presidencia, sobre sus comentarios acerca de Edward Snowden. Ella fue entrevistada por The Guardian, el diario que publicó por primera vez las revelaciones basadas en los documentos de Edward Snowden. Si pudiera comentar la primera declaración.
HILLARY CLINTON: Bueno, yo diría que, en primer lugar, Edward Snowden violó nuestras leyes, y esto no puede ser ignorado o dejado de lado.
AMY GOODMAN: Julian Assange, ¿qué opina de esa primera declaración de Hillary Clinton? Julian Assange: Bueno, siempre es interesante cuando alguien proclama ser un maestro sobre lo que está dentro de la ley y lo que no está dentro de la ley. Hemos visto esto en muchas ocasiones con los generales del Pentágono y otras figuras del Departamento de Estado, incluyendo a Hillary. Lo hemos visto en este caso con el general Alexander, hablando de lo que es legal y lo que no es legal.
AMY GOODMAN: El ex jefe de la NSA.
JULIAN ASSANGE: Si. Pero, en realidad, al final, en Estados Unidos, es la Corte Suprema quién determina qué es legal y qué no lo es. Y parte de lo que se discute dentro de la Corte Suprema es la Constitución de EE.UU. y las obligaciones de la Primera Enmienda. Por lo tanto, si la Ley de Espionaje es constitucional es una pregunta muy interesante que no ha sido debidamente contestada antes. De hecho, el gobierno de EE.UU. ha sido muy cuidadoso en no permitir una apelación en relación a la Ley de Espionaje, con el fin de mantener la amenaza existente y que esta ley no sea declarada inconstitucional en la Corte. Por lo tanto, creo que hay que preguntarse si Edward Snowden, con sus actividades, realmente violó la ley. Pero aún así, después se podría decir: de acuerdo, bueno, en caso de que violara la ley, ¿no era eso lo correcto? Tal vez la ley no está actualizada. Tal vez la ley está mal.
AMY GOODMAN: Vamos a la siguiente declaración de Hillary Clinton.
HILLARY CLINTON: En segundo lugar, creo que si su principal preocupación era despertar un debate en nuestro país sobre el conflicto que hay entre la privacidad y la seguridad, había otras maneras de hacerlo, en lugar de robar una cantidad enorme de información que no tiene nada que ver con EE.UU. o con los ciudadanos estadounidenses.
JULIAN ASSANGE: Como periodista, he trabajado en varios momentos documentando lo que la Agencia de Seguridad Nacional ha hecho en relación a su vigilancia masiva durante más de 20 años. Otros periodistas, algunos de ellos lo han hecho muy bien, también han tratando de poner al descubierto a la Agencia de Seguridad Nacional. Y otros informantes han salido a la luz pública- como Thomas Drake o William Binney, ambos de la Agencia de Seguridad Nacional, por ejemplo. Pero ¿cuál era el problema? Si bien podríamos señalar, basados en un análisis sofisticado, lo que la Agencia de Seguridad Nacional está haciendo— por ejemplo, mirar este pedazo aquí, mirar este fragmento de testimonio ante el Congreso, mirar los registros de citación, mirar la tecnología que están comprando a esta empresa, mirar el número de empleados, examinar el presupuesto del Departamento de Defensa en su conjunto- al agregar todo se puede calcular el presupuesto de la Agencia de Seguridad Nacional. Ese es un escenario muy complejo, y no es un escenario que pueda generar reformas políticas y debates. Lo que hizo Edward Snowden, al dar a conocer documentos clasificados, que eran documentos oficiales, que lo eran incluso el año pasado, fue demostrar, incluso a las personas que no lo entendían, la complejidad de lo que estaba pasando. Por lo tanto, tenemos la prueba. La gente intentó comenzar un debate, utilizando todo tipo de métodos, incluidos los ex informantes de la Agencia de Seguridad Nacional, y solo los documentos que son una fuente primaria pueden probablemente comenzar este debate sobre un tema tan complejo como lo es la vigilancia masiva.
AMY GOODMAN: Acá está Hillary Clinton de nuevo.
HILLARY CLINTON: Yo diría que, en tercer lugar, hay muchas personas en nuestra historia que han cuestionado seriamente el comportamiento del gobierno. Y lo han hecho con o sin la protección a los informantes, y han resistido y se han enfrentado a cualquier reacción que haya generado su cuestionamiento público.
AMY GOODMAN: ¿Julian Assange?
JULIAN ASSANGE: Bueno, Hillary Clinton está haciendo referencia a, sin mencionar el nombre de Daniel Ellsberg, al famoso informante de los Papeles del Pentágono en la década de 1970. Hay una razón por la que no menciona su nombre, y es porque Daniel Ellsberg ha hablado varias veces este año y dijo que, de hecho, él no hubiera podido hacer lo que hizo en la década de 1970 hoy en día, porque la situación ha cambiado, así como los tribunales— los privilegios del Estado para guardar secretos, como han guardando todos los casos de seguridad nacional en Alexandria, Virginia- no hay una selección de jurados que sea neutral- por eso él no podría hacer eso de nuevo. En realidad, así es para todos los informantes de seguridad nacional que tienen en sus manos documentos clasificados. No puedes defenderte en un proceso judicial normal, tal como el público en general lo entiende. Usted es absorbido por un sistema muy agresivo que está en contra suya desde el principio.
AMY GOODMAN: Hillary Clinton de nuevo.
HILLARY CLINTON: El Sr. Snowden tomó todo este material. Huyó a Hong Kong. Pasó un tiempo con los rusos en el consulado. Luego se fue a Moscú en busca de la protección de Vladimir Putin, lo que es increíblemente irónico dada la vigilancia que hay en Rusia. Si quiere volver a casa, sabiendo que tendrá que rendir cuentas, pero también teniendo de posibilidad de defenderse, esa es su decisión. Pero sé que nuestras fuerzas de inteligencia están haciendo lo posible para entender exactamente qué fue lo que el tomó.
AMY GOODMAN: Esa fue Hillary Clinton. ¿Julian Assange?
JULIAN ASSANGE: Esto, tristemente, es típico de Hillary Clinton. Tenemos datos sobre este asunto. Ni siquiera la Agencia de Seguridad Nacional lo acusa de trabajar con los rusos. De hecho, la Agencia de Seguridad Nacional, formalmente, después de investigar, dijo que no piensan que él estuviera trabajando con los rusos, al menos no antes de que él saliera de la agencia. Y Hillary Clinton, sin embargo, intenta cambiar el orden a la cronología con el fin de desprestigiar a Edward Snowden al decir que él era un espía ruso. El verdadero orden de las cosas es que Edward Snowden fue a Hong Kong. Entonces percibió que la situación era muy difícil, nos buscó para que le ayudáramos, y a partir de ese momento estuvimos involucrados con él íntimamente. Así que sé exactamente, yo mismo, y nuestro personal, qué fue lo que pasó. Presentamos 20 solicitudes de asilo a nombre de Edward Snowden a diferentes países, de América Latina. La intención de Snowden fuera a América Latina- Venezuela, Nicaragua, Ecuador también era favorable, y Bolivia le ofreció asilo. En ruta hacia América Latina, el Departamento de Estado de EE.UU. canceló su pasaporte, dejándolo encerrado en Rusia, incapaz de tomar su vuelo, que ya había reservado. Todo su vuelo se había reservado cuando él estaba en Hong Kong.
AMY GOODMAN: Pero ella sí dice que él fue a la embajada rusa en Hong Kong.
JULIAN ASSANGE: Hillary dice que él fue al consulado ruso en Hong Kong. No sé nada de eso, pero estoy seguro de que él buscó distintas opciones de asilo, y eso para cualquier persona tiene sentido, para cualquiera en una situación tan difícil. No es irónico que Edward Snowden haya sido abandonado por el Departamento de Estado de EE.UU. en Rusia. El asilo es un asunto serio. Es preocupante que los países de Europa occidental, por ejemplo, a los que él les pidió asilo- Francia, Alemania, España- decidieron no sentarse en esta mesa. Estaban demasiado asustados por sus relaciones geopolíticas. Es preocupante que Edward Snowden, como ciudadano estadounidense, sentía que no podía hablar con libertad en Estados Unidos. Y tiene razón. Lo que nos aconsejan nuestros abogados es que él no vuelva a Estados Unidos. Sería muy tonto hacerlo.
AMY GOODMAN: Volvamos a Hillary Clinton, que ahora habla sobre este debate que está teniendo lugar en Estados Unidos.
HILLARY CLINTON: El debate sobre cómo equilibrar mejor la seguridad y la libertad ya se estaba dando antes de que él huyera. El presidente ya había dado un discurso. Los miembros del Senado ya estaban hablando de ello. Así que no le doy crédito por el debate. Creo que puede haber aumentado la visibilidad del debate, pero el debate ya había comenzado.
JULIAN ASSANGE: Una buen cantidad de personas en la comunidad que defiende las libertades civiles en Estados Unidos, en la comunidad que defiende la intimidad en el resto del mundo, y especialistas, periodistas que investigan la seguridad nacional como yo, han hecho seguimiento a lo que la Agencia de Seguridad Nacional ha estado haciendo durante mucho tiempo. Hemos tratado con mucho esfuerzo comenzar el debate. Y, sí, hubo pequeños debates, que en realidad no llevaron a ningún lado. Las demandas presentadas por el FEP y la ACLU no llevaron a nada, porque no tenían evidencias. Y lo que Edward Snowden reveló fue la evidencia, los documentos, y fue esta fuente primaria como evidencia la que lideró este debate. Todo el mundo nota la diferencia- la mayoría de la gente no recuerda oír hablar de la Agencia de Seguridad Nacional antes del año pasado. Ahora todo el mundo sabe de su existencia, Y esto fue casi en su totalidad resultado de estas revelaciones.
AMY GOODMAN: Hillary Clinton habló de otros puntos críticos.
HILLARY CLINTON: No sé de qué se le está acusando; esas son acusaciones están bajo secreto. No tengo idea de lo que ha sido acusado. No estoy segura de que él sepa de qué lo han acusado. Pero en cualquier caso, lo que sé, como exabogada, es que él tiene el derecho a la defensa. Y ciertamente tiene derecho tanto a una defensa legal como a una defensa pública, que por supuesto puede afectar a la defensa legal.
AMY GOODMAN: Julian Assange, ¿su respuesta?
JULIAN ASSANGE: Como ha dicho Daniel Ellsberg, el famoso informante de los Papeles del Pentágono, no es posible que un informante de la seguridad nacional pueda tener un juicio justo hoy en día en Estados Unidos. No es posible tener un juicio justo ya que todos los juicios se llevan a cabo en Alexandria, Virginia, donde la selección del jurado se hace en el lugar con mayor número de empleados militares y gubernamentales de todo Estados Unidos. No es posible tener un juicio justo, porque el gobierno de EE.UU. ha utilizado anteriormente sus privilegios sobre el secreto de Estado para evitar que la defensa use materiales clasificados a su favor. No es posible tener un juicio justo, porque un acusado en un caso de seguridad nacional está bajo unas medidas administrativas especiales, lo que hace que sea muy difícil acceder a los materiales del caso, para reunirse con los abogados, hablar con gente, etc. Así que, este es- simplemente no es un sistema justo. E incluso si usted eventualmente gana cuando se decida el caso en la Corte Suprema, implica pasar siete años más o menos en unas condiciones muy difíciles tratando de defenderse, en lugar de lo que ha pasado con Edward Snowden. Como resultado de tener asilo, podemos hablar de los problemas, no estamos hablando de si Snowden es culpable o no, y el propio Edward Snowden puede decirle al mundo: “Bueno, miren, esto es lo que realmente ocurrió. Esto es lo que está pasando “.
AMY GOODMAN: Volvamos a lo que Hillary Clinton tiene que decir.
HILLARY CLINTON: Pero la otra pregunta para la que nunca he tenido una respuesta satisfactoria, es que si su principal preocupación era lo que estaba pasando dentro de Estados Unidos, entonces ¿por qué se llevó también tanta información sobre lo que estaba pasando con Rusia, con China, con Irán, con al-Qaeda?
AMY GOODMAN: Esa fue Hillary Clinton en su entrevista a The Guardian. Sobre este último punto, ¿Julian Assange?
JULIAN ASSANGE: No me sorprende que Hillary Clinton crea que los seres humanos que no son formalmente ciudadanos estadounidenses no tengan derechos. Pero no todo el mundo piensa así. Las personas de otros países tienen derechos. Ahora bien, si nos fijamos en los aspectos prácticos de Edward Snowden para adquirir documentos mientras era contratista para Booz Allen Hamilton, cuando trabajaba para la Agencia de Seguridad Nacional y, antes de eso, mientras era un contratista para Dell, la Agencia de Seguridad Nacional tiene un programa de vigilancia masivo, un programa de vigilancia estratégica. La misma tecnología, los mismos protocolos que son utilizados para vigilar a la gente dentro de Estados Unidos, son utilizados para vigilar personas fuera de Estados Unidos, etc. Así que si uno está tratando de recopilar información para exponer esta vigilancia masiva, entonces, por su naturaleza, uno va a exponer las prácticas de la Agencia de Seguridad Nacional en todo el mundo, porque el mismo proceso ocurre si se está en Inglaterra o en Alemania o en Estados Unidos.
AMY GOODMAN: Este fue Julian Assange respondiendo a la entrevista de Hillary Clinton en The Guardian. Phoebe Greenwood de The Guardian fue quien entrevistó a la exsecretaria de Estado. Pueden ver la entrevista completa en TheGuardian.com. Regresamos a mi conversación con Julian Assange en un minuto.
Traducido por Camila Osorio. Editado por Igor Moreno y Democracy Now! en Español