El Huracán Katrina dejó por lo menos 55 personas muertas tras arremeter el lunes contra Louisiana, Mississippi y Alabama, con vientos de 233 kilómetros por hora. Los titulares de la edición hoy del diario Times-Picayune de Nueva Orleans fueron “Catastrófico” y “Katrina: El huracán que siempre hemos temido”. Se prevé que el registro de muertes aumentará cuando las unidades de rescate lleguen a las zonas más devastadas. Un millón de personas quedaron sin energía eléctrica. Aún se desconoce el número de personas que quedaron sin hogar. Es probable que el verdadero alcance de los daños se conozca recién dentro de unos días. La Cruz Roja Estadounidense señaló que Katrina la ha obligado a emprender “la mayor operación de recuperación en su historia”. Pero la destrucción pudo ser mucho peor. Se había pronosticado que el huracán pasaría directamente por el centro de Nueva Orleans, pero cambió de dirección hacia el este. De todos modos, 40.000 casas están bajo agua en Nueva Orleans. Los fuertes vientos destruyeron parte del techo del estadio Superdome de Louisiana.
Aparentemente la ciudad más devastada es Gulfport, Mississippi. Tres de los cinco hospitales de la ciudad se quedaron sin salas de emergencia. Volaron los techos de ocho escuelas que eran utilizadas como refugios de emergencia. El jefe de bomberos de la ciudad calcula que 75 por ciento de las construcciones de Gulfport sufrieron importantes daños en sus techos, o los perdieron por completo.
El máximo general de la Fuerza Aérea dijo el lunes que los aviones de guerra estadounidenses deberán permanecer en Irak por tiempo indeterminado, incluso después de que se retiren de allí las tropas terrestres estadounidenses. El General John Jumper dijo: “Mantendremos algún tipo de presencia rotativa en el área, por tiempo indeterminado. Tenemos intereses en esa parte del mundo y nos interesa mantener contacto con los militares de la zona.”
En Irak, el lunes se realizó el funeral de Waleed Khaled, el técnico de sonido que trabajaba para la agencia de noticias Reuters y fue asesinado el domingo por las fuerzas estadounidenses. Khaled, de 35 años de edad, recibió disparos en la cara y al menos otros cuatro en el pecho. Según Reuters, se escuchó a soldados estadounidenses burlarse cuando la familia de Waleed Khaled apareció en la escena del crimen. Mientras que los familiares acongojados inspeccionaban el cadáver, un soldado estadounidense dijo “No se molesten. No vale la pena.” Otros soldados hacían chistes entre sí a unos metros del cadáver. Según Reporteros Sin Fronteras, Khaled es el periodista número 66 que muere en Irak desde que comenzó la invasión en marzo de 2003. En toda la Guerra de Vietnam murieron 63 periodistas.
Un colega de Waleed Khaled, el camarógrafo Haider Kadhem, de Reuters, permanece detenido por las fuerzas estadounidenses. El también recibió un disparo de un francotirador estadounidense y fue el único testigo de la muerte de Khaled. Reuters exige su liberación inmediata. El editor mundial de la agencia, David Schlesinger, dijo: “No podemos entender qué razón existe para mantener a este periodista detenido por más de veinticuatro horas, luego de que fuera víctima inocente de un hecho en que su colega fue asesinado”. El Comité para la Protección de los Periodistas también exigió la liberación inmediata de Khadem. Mientras tanto, un tercer periodista iraquí que trabaja para Reuters lleva tres semanas incomunicado en la prisión de Abu Ghraib, sin que se hayan presentado acusaciones en su contra.
Siguiendo con noticias de Irak, miles de manifestantes sunitas se congregaron ayer en Tikrit, el pueblo natal de Saddam Hussein, para protestar contra el proyecto de nueva Constitución.
Esta noticia proviene de África. Un funcionario de alta jerarquía de la ONU acusó al presidente Bush de “perjudicar a África” al reducir el financiamiento para donaciones de de preservativos, una medida que podría poner en peligro el éxito de la lucha contra el VIH/SIDA en Uganda. Stephen Lewis, enviado especial del secretario general de la ONU para el VIH/SIDA en África, dijo que el recortes del financiamiento de preservativos y el énfasis en promover la abstinencia sexual han contribuido a la escasez de preservativos en Uganda. Uganda ha sido uno de los pocos países africanos que logró reducir el índice de infección por VIH.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) obtuvo documentos internos del gobierno que muestran que el FBI señaló a dos grupos activistas de Michigan como potencialmente “vinculados con actividades terroristas”. Uno de los grupos es la organización contra la guerra Direct Action (Acción Directa). El segundo grupo se llama By Any Means Necessary (Por Cualquier Medio Necesario), y se trata de una organización nacional dedicada a defender la acción afirmativa, la integración y otras conquistas del movimiento de los derechos civiles. El abogado del personal de ACLU, Ben Wizner, dijo: “Cuando el FBI y los organismos locales encargados de hacer cumplir la ley identifican a los defensores de la acción afirmativa como potenciales terroristas, todos los estadounidenses tienen motivos para preocuparse”. La ACLU realiza una investigación para determinar si las Fuerzas de Acción Conjunta contra el Terrorismo del FBI han realizado seguimientos por razones políticas. En el marco de esa investigación, averiguó que el FBI recopiló miles de páginas de documentos relacionados con otros grupos activistas como Greenpeace, Unidos por Paz y Justicia, Código Rosa, Personas a favor del Trato Ético de los Animales, el Comité Antidiscriminación Árabe-Estadounidense y el Consejo de Asuntos Públicos Musulmanes.
En Chicago, víctimas de maltrato policial solicitan a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que investigue las acusaciones de que la policía de Chicago golpeó y torturó sistemáticamente a estadounidenses afrodescendientes para lograr confesiones. Casi 140 víctimas alegaron haber sido maltratadas y torturadas por la policía de Chicago en las últimas décadas. Los abogados de las víctimas se quejaron de que un fiscal especial ha demorado demasiado en realizar procesamientos penales por las acusaciones de tortura. Los abogados solicitan a la Comisión Interamericana que examine las pruebas en su sesión de octubre. Esa comisión tiene el cometido de investigar casos de violación de derechos humanos, por mandato de la Organización de Estados Americanos y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
En Capitol Hill, tres congresistas demócratas solicitaron al Secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, que investigue la destitución de una alta funcionaria civil del ejército que criticó públicamente el otorgamiento de un contrato a Halliburton, sin llamado a licitación, para realizar trabajos relacionados con el petróleo en Irak. La funcionaria, Bunnatine Greenhouse, había trabajado en el Pentágono durante 20 años. Desde 1998 se desempeñaba como jefa supervisora de contratos en el Cuerpo de Ingenieros del Ejército. El año pasado, Greenhouse criticó públicamente los contratos de la filial de Halliburton Kellog Brown & Root.
En Los Ángeles, una nueva coalición anunció sus planes para realizar una campaña nacional contra el reclutamiento militar de estudiantes de color en las escuelas. Entre los integrantes de la alianza están los grupos Latinos por la Paz y la Coalición Contra el Militarismo en las Escuelas. El anuncio se realizó en el Parque Salazar, en el 35 aniversario de la Moratoria Chicana, cuando 20.000 manifestantes tomaron las calles de Los Ángeles para protestar contra el número desproporcionado de latinos que morían en la Guerra de Vietnam. El Parque Salazar fue nombrado en honor al periodista Ruben Salazar, que cubría la Moratoria y murió tras recibir un disparo de la policía. La coalición convoca a los estudiantes a que firmen formularios para impedir que los militares reciban su información personal, y para evitar que se les someta a la batería de pruebas de aptitud vocacional de los servicios armados.
En El Paso, Texas, un juez estadounidense comenzó la audiencia del caso de deportación de Luis Posada Carriles, el exiliado cubano que es requerido en Venezuela por volar un avión cubano en 1976, causando la muerte de 73 personas. Posada ingresó recientemente en forma ilegal a Estados Unidos y ahora busca asilo. Es un agente entrenado por la CIA, que estuvo vinculado con varios atentados contra Fidel Castro e intereses cubanos. El Secretario General de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, dijo el lunes que Estados Unidos debería extraditar a Posada si hay pruebas que lo vinculan con el ataque de 1976. Mientras tanto, el juez que preside el caso advirtió a Posada de que lo deportará a Venezuela si ingresó a Estados Unidos en forma ilegal.