Irán hizo un lanzamiento de prueba de nueve misiles de amplio y mediano alcance, entre ellos uno que dice podría alcanzar bases militares israelíes y estadounidenses en Medio Oriente. El ensayo tiene lugar en medio de tensiones por un posible ataque de Estados Unidos o Israel contra Irán. El mes pasado el New York Times informó que Israel realizó un gran ejercicio militar que parecía ser un ensayo de un posible ataque con bomba contra las instalaciones nucleares de Irán. La televisión estatal iraní dijo que las pruebas pretenden demostrar: “La voluntad y autoridad (iraní) a los enemigos que han amenazado a Irán con lenguaje duro en las últimas semanas”. El martes, funcionarios iraníes dijeron que Irán atacaría blancos israelíes y estadounidenses si era atacado.
El ensayo de misiles de Irán tuvo lugar horas después de que Estados Unidos y República Checa firmaron un acuerdo muy esperado para instalar parte de un sistema de misiles estadounidense en suelo checo. El gobierno de Bush dice que el sistema de misiles protegería a Europa de misiles iraníes, pero es ampliamente visto como una amenaza de ataque contra Irán. La República Checa albergará un radar que acompañará a diez misiles balísticos ubicados en Polonia. En Praga, la Secretaria de Estado Condoleeza Rice se reunió con funcionarios checos para realizar un brindis con champán por el acuerdo de misiles. Rice dijo que el sistema de misiles debería proceder sin perjuicio de quien gane las elecciones de noviembre.
La Secretaria de Estado Condoleeza Rice dijo: “Enfrentamos, con los iraníes, al igual que nuestros aliados y amigos, una creciente amenaza de misiles que se está volviendo cada vez más larga y profunda, y aunque el apetito iraní de tecnología nuclear hasta el momento no está verificado, y me cuesta creer, que un Presidente estadounidense no vaya a querer tener la capacidad de defender nuestro territorio, el territorio de nuestros aliados, ya sea en Europa o en Medio Oriente”.
Los planes de misiles aguardan aprobación en Polonia donde legisladores rechazaron los incentivos de Estados Unidos como insuficientes. El acuerdo se enfrentaría a una mayoría de oposición pública tanto en Polonia como en República Checa. En Praga, más de mil manifestantes se congregaron en una plaza del centro de la ciudad luego de que se anunció el acuerdo.
Un manifestante dijo: “Esto no es bueno para nuestra república, no es bueno para Europa y no es bueno para la paz y la seguridad del mundo. La gente está en contra del radar por diferentes razones. Los radares y los misiles no tienen seguridad ni razonamiento defensivo”.
Rusia también se opuso fuertemente a los planes del sistema de misiles. En la ONU, el embajador ruso Vitaly Churkin dijo que el sistema de misiles aumentaría la proliferación y la amenaza de conflicto militar.
El Embajador Ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, dijo: “Cada acción militar provoca una respuesta militar. Esta es la regla fundamental, de esto se tratan los militares. Si hay acción militar, si hay un cambio de postura estratégica, hay una respuesta de postura estratégica. Esto se puede leer en cualquier manual militar. No hay nada sorprendente. No hay nada que preguntar.”
El gobierno iraquí continúa insistiendo en una fecha para la retirada de los soldados estadounidenses de Irak. El martes, el Asesor Nacional de Seguridad iraquí Mowaffak al-Rubaie dijo que su gobierno no firmaría ningún acuerdo que mantuviera a soldados estadounidenses en Irak sin un plazo para su retirada.
El Asesor de Seguridad Nacional iraquí Mowaffak al-Rubiae dijo: “No podemos tener un memorando de acuerdo con fuerzas extranjeras a menos que incluya fechas y horizontes claros que determinen la retirada de las fuerzas extranjeras. Estamos hablando claramente de su retirada. Estamos esperando impacientes el día en que el último soldado extranjero se vaya de Irak”.
Los comentarios de Al-Rubaiwe fueron los más fuertes hasta la fecha realizados por un funcionario iraquí solicitando un plazo para la retirada. El lunes, el Primer Ministro iraquí Nuri al-Maliki aparentemente sorprendió a la Casa Blanca cuando también solicitó un plazo de retirada. La Casa Blanca desestimó los comentarios como intentos de tranquilizar al público iraquí y regional. El martes el portavoz de la Casa Blanca Tony Fratto dijo que las actuales negociaciones no hablan de fechas específicas para la retirada de Estados Unidos de Irak. Fratto agregó: “Tenemos mucha confianza de que el liderazgo político en Irak no tomaría ninguna acción que desestabilizara el país”.
En Turquía, seis personas murieron tras un ataque frente al cosulado de Estados Unidos en Estambul. Tres policías turcos murieron junto con tres atacantes.
En Estados Unidos, el vicepresidente Dick Cheney está siendo acusado de censurar una declaración sobre las amenazas a la salud que representa el calentamiento global. El ex experto de clima del gobierno, que se convirtió en informante, Jason Burnett dice que la oficina de Cheney intervino para omitir cualquier mención a los daños humanos del calentamiento global en una declaración preparada por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. El testimonio fue reducido a seis páginas de las catorce originales. Burnett renunció a la Agencia de Protección Ambiental el mes pasado en protesta a una decisión de impedir los límites a las emisiones en California. Sus acusaciones surgieron cuando el Presidente Bush estaba en Japón anunciando el apoyo de Estados Unidos al plan del Grupo de los Ocho de trabajar hacia una reducción a la mitad de las emisiones para 2050. Los críticos dicen que el plan es poco preciso y que carece de mecanismos para llevarlo a la práctica.
En noticias de la campaña electoral, el senador Barack Obama está negando acusaciones de que cambió sus posiciones políticas para atraer a más votantes. Obama fue criticado por sus recientes posturas como el apoyo a la inmunidad de las empresas de telecomunicaciones en el programa de espionaje del gobierno de Bush; por apoyar la decisión de la Corte Suprema de revocar una prohibición de armas de Washington D.C.; y por decir que estaría abierto a revisar su promesa de retirar los soldados estadounidenses de Irak. El martes, Obama fue interrogado acerca de las acusaciones de haber cambiado su posición en una parada de su campaña en Georgia.
El senador Barack Obama dijo: “Permítanme, antes que nada, hablar sobre el tema más amplio, toda esta idea de que estoy cambiando al centro o de que estoy revirtiendo mi posición o esto o aquello. Ya saben, la gente que dice esto aparentemente no me ha escuchado…Me he organizado con iglesias durante años en la comunidad. Entonces la idea de que de algún modo estoy tratando de aparentar que soy más centrista, no es verdad…No supongan que si no estoy de acuerdo con ustedes en algo, debe ser porque estoy haciendo eso políticamente. Puedo simplemente estar en desacuerdo con ustedes”.
Mientras tanto, del lado republicano, el senador John McCain está siendo criticado nuevamente por sus comentarios sobre Irán. El martes, McCain fue interrogado acerca de una reciente encuesta que indica que las exportaciones de Estados Unidos a Irán han aumentado durante el gobierno de Bush, principalmente la de cigarrillos. McCain respondió: “Quizá esa es una forma de matarlos”. McCain dijo rápidamente que era una broma. El año pasado McCain generó polémica por cantar la melodía de la canción “Barbara Ann” con la letra cambiada a “Bomb Iran” (Bombardear Irán).
En noticias del Congreso, la empresa de encuestas Rasmussen Reports dice que la aprobación pública del Congreso de Estados Unidos ha caído a un dígito por primera vez en la historia. Según la última encuesta, apenas nueve por ciento de los estadounidenses cree que el Congreso está haciendo una excelente gestión. El cincuenta y dos por ciento de los encuestados dice que el Congreso está haciendo una mala gestión, una cifra histórica.
El gobierno de Bush está impidiendo que la Unión Estadounidense por las Libertades´Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) le pague a los abogados que representan a prisioneros en Bahía de Guantánamo. La ACLU dice que la Casa Blanca está “obstruyendo la justicia” al demorar las licencias del Departamento del Tesoro necesarias para pagarle a los abogados. El Director Ejecutivo de la ACLU, Anthony Romero dijo: “El gobierno está resistiendo nuevamente al no permitir que se paguen dólares privados de estadounidenses a abogados estadounidenses para que defiendan las libertades civiles”.
Una coalición de grupos de derechos humanos está solicitando a China que libere a ocho prisioneros políticos antes de los Juegos Olímpicos de Beijing el mes próximo. El martes, a un mes del día anterior al comienzo de los juegos, los grupos dijeron que la liberación de los ocho prisioneros sería un gesto simbólico para demostrar una mejora en el respeto a los derechos humanos. El ex prisionero chino Yang Jiaali dijo que los Juegos Olímpicos deberían cuestionar las políticas de China.
Yang Jiaali dijo: “El gobierno chino está aprovechando la oportunidad de ser el anfitrión de los Juegos Olímpicos para mostrar que China y el gobierno chino quieren que el mundo vea y encubra lo que China y el gobierno chino no quieren que vea el mundo exterior. Entonces, venimos aquí a revelar esta China al otro lado del mundo, y más que eso, tenemos que enviar un mensaje a la comunidad internacional”.
Y un panel bipartito está solicitando una nueva ley que haría más difícil que la Casa Blanca establezca una guerra.
El panel, encabezado por los ex Secretarios de Estado James Baker y Warren Christopher, dice que el Presidente debería estar obligado a consultar con el Congreso antes de lanzar un ataque. En una conferencia de prensa, Baker solicitó la derogación de la Ley de Poderes de Guerra de 1973.
James Baker dijo: “Tras 14 meses de estudio, incluyendo siete reuniones en el país y entrevistas con más de 40 especialistas en la materia, nuestra comisión concluyó por unanimidad que la ley central que rige esta decisión fundamental, es decir la Ley de Poderes de Guerra de 1973, es ineficaz y debería ser derogada, y debería ser reemplazada, sin embargo, con una ley mejor”.
El gobierno de Bush afirmó la aprobación del Congreso de la actual ocupación de Estados Unidos en Irak al citar la autorización del ataque contra Saddam Hussein en octubre de 2002. Los críticos dicen que la Casa Blanca excedió la aprobación inicial.