El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, estaría en un lugar secreto de Gran Bretaña, en tanto que existe una orden internacional de arresto en su contra. Assange es requerido para ser interrogado por las acusaciones de inconducta sexual en Suecia. En la última semana, se conocieron informes de que las dos personas que lo acusan alardearon de los encuentros que mantuvieron por separado con él y de que la fiscalía lo acusa de haber tenido sexo consensuado sin usar preservativo. Se ha dicho también que una de las personas que lo acusa tendría vínculos con un grupo de exilados cubanos de derecha relacionado con la CIA. Mientras tanto, Assange afirma que ha recibido centenares de amenazas de muerte, entre ellas, algunas dirigidas a sus hijos. El abogado de Assange, Mark Stephens, dijo que la fiscalía sueca todavía no se ha comunicado con Assange o sus representantes legales.
Mark Stephens afirmó: “[la fiscal sueca Marianne Ny] sabe cómo hacer eso, por lo que la pregunta que tienen que hacerse es: '¿Por qué desperdiciaría la oportunidad de entrevistar a Julian en Estocolmo, de reunirse con él en la embajada sueca o por videoconferencia, de manera de registrar las pruebas en sueco?' Todas estas son maneras totalmente normales y adecuadas de aproximación, y sin embargo las ha arrojado por la ventana. Esto no parece ser un intento de llegar a la verdad o a la justicia, parece ser una persecución, no una acusación”.