Se está discutiendo una polémica medida pensada para proteger los bosques de todo el mundo en la conferencia de la ONU sobre el cambio climático, que se celebra en Cancún. El programa para la reducción de emisiones por la deforestación y la degradación de los bosques (REDD por sus siglas en inglés) incluiría los bosques en los mercados emergentes de carbono, lo que permitiría a los gobiernos y las corporaciones comprar permisos para proteger los bosques como una forma de compensar el carbono liberado a la atmósfera a través de la polución industrial. Aunque se suele presentar como un medio para frenar la deforestación, existe una oposición generalizada a REDD por parte de organizaciones ecologistas e indígenas. Hablamos con Anne Petermann, del Global Justice Ecology Project (Proyecto ecológico para la justicia global).