Los ambientalistas se declararon victoriosos luego de que el gobierno de Obama anunciara el jueves que postergaría cualquier decisión sobre el proyecto Keystone XL —un oleoducto de arenas alquitranadas de más de dos mil quinientos kilómetros— hasta el año 2013. El anuncio se hizo pocos días después de que más de 10.000 personas rodearan la Casa Blanca para pedirle al presidente Obama que rechazara el proyecto. Esta fue la segunda acción importante contra el proyecto organizada por el movimiento mundial contra el cambio climático 350.org, que dirige Bill McKibben, y por el grupo Tar Sands Action. A finales de agosto y principios de septiembre, unas 1.200 personas fueron arrestadas en Washington, DC, en una campaña de desobediencia civil que duró dos semanas. “Creemos que esta postergación es el fin del oleoducto”, afirma la escritora y activista canadiense Naomi Klein. “De no ser así, es decir, si el tema del oleoducto vuelve a surgir después de las elecciones, la gente ya prometió poner el cuerpo para detenerlo”. Klein agrega: “No creo que hubiéramos ganado si no existiese el movimiento 'A Ocupar Wall Street'…Así se como se tuerce la agenda.”