El presidente Barack Obama y los líderes del Congreso llegaron a un acuerdo sobre el presupuesto el viernes a último momento, evitando por estrecho margen la paralización del gobierno. El acuerdo recortaría aproximadamente 38.000 millones de dólares de un presupuesto federal que se espera supere los 3,7 billones de dólares este año. Hablamos con Jeffrey Sachs, director del Earth Institute en la Universidad de Columbia. “Muchos de los que apoyábamos al presidente Obama creemos que acaba de abandonar el barco”, explica Sachs. “Se lo dejó a la derecha que solo quiere recortes fiscales para los ricos, mientras que los ciudadanos estadounidenses dicen muy claramente en todos los sondeos de opinión que si quieren acabar con el déficit, deben aumentar los impuestos a los ricos, recortar el gasto militar, eliminar el exceso de beneficios de la industria aseguradora y de salud y hacer cosas que realmente produzcan un cambio, no que castiguen a los pobres”.