Relacionado
Continúan los furiosos enfrentamientos en las calles en la afueras de Damasco, capital siria, donde los activistas denuncian que al menos 62 personas perdieron la vida en todo el país el domingo. Esto ocurre cuando el Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, pidió a las autoridades sirias, en particular al presidente Bashar al-Assad, poner fin de inmediato a la violencia contra los manifestantes, y al tiempo que planea aceptar un proyecto de resolución esta semana en el que se le pide a Assad que renuncie y transfiera el poder. “Ellos están simplemente observando el baño de sangre en Siria y siguen hablando y hablando sin hacer nada”, dice Razan Zaitouneh, abogada y activista de derechos humanos, que se comunica con nosotros desde Damasco. También nos comunicamos con Karam Nachar, ciber-activista que vive en Estados Unidos y trabaja con los manifestantes sirios a través de plataformas de medios sociales.