La conferencia de las Naciones Unidas sobre cambio climático (conocida como “COP18”) terminó el sábado, luego de que los negociadores lograran un débil acuerdo que no hará nada por detener las crecientes emisiones de gases que provocan el efecto invernadero a nivel mundial. El llamado Portal Climático de Doha extiende el Protocolo de Kyoto ocho años más y prepara el camino para conversaciones sobre un nuevo pacto de la ONU que empiece a regir a partir de 2020. En este acuerdo, Estados Unidos no asumió ningún compromiso nuevo de reducir la emisión de gases que provocan el efecto invernadero ni de aumentar su ayuda a los países que padecen el impacto del cambio climático. “Cuando fuimos a Doha, esperábamos que -después de que el presidente [Obama] mencionara el cambio climático en la ceremonia de asunción [de su segundo mandato presidencial], después del huracán Sandy, después de los debates entre políticos de primera línea en EE.UU., hubiera un eje sobre políticas relacionadas al cambio climático y en cambio vimos exactamente el mismo tipo de tácticas que hemos visto en los últimos cuatro años por parte de EE.UU.”, afirma Samantha Smith, titular de la Iniciativa Global de Cambio Climático y Energía de la organización World Wildlife Fund. “Pensamos que ya es hora de que el presidente Obama de un paso al frente y empiece un debate nacional sobre el cambio climático”.