A menos de tres meses de las elecciones presidenciales, tanto los republicanos como los demócratas están inundando los medios con anuncios de campaña. Se ha escrito mucho acerca de los Comités de Acción Política, o súper PACs, que hay detrás de estos anuncios, pero muy poco se sabe acerca de las organizaciones sin fines de lucro, autodenominadas de asistencia social, que están por lejos gastando más que los súper PACs en propaganda televisiva para la contienda presidencial. Hasta el 8 de agosto, estas organizaciones sin fines de lucro habían gastado más de 71 millones de dólares en anuncios que mencionan a un candidato a la presidencia, mientras que los súper PACs han gastado estimadamente 56 millones. Y, a diferencia de los súper PACs, son organizaciones que gozan de exenciones impositivas y no tienen la obligación de revelar la identidad de sus donantes. Una nueva investigación realizada por ProPublica revela cómo estas organizaciones sin fines de lucro están explotando su estatus fiscal para llevar a cabo una campaña presidencial permanente y con financiamiento secreto. Hablamos al respecto con la periodista de
investigación Kim Barker.