Desde Bahréin se comunica con nosotros la activista Zainab Alkhawaja a quien el gobierno bahreiní acaba de liberar de la cárcel. “Un año en la cárcel no es nada”, afirma Alkhawaja acerca del tiempo que pasó tras las rejas. “Porque no es nada en comparación con lo que estamos dispuestos a sacrificar para conseguir nuestros objetivos, la democracia en nuestro país”. El 3 de marzo, la activista podrïa volver a la cárcel luego de que se presenta ante la corte para enfrentar cargos por dañar propiedad de la policía, estropear un cuadro del rey e insultar a un agente de policía. Su padre, el activista Abdulhadi Alkhawaja de larga trayectoria permanece en la cárcel cumpliendo una condena a cadena perpetua. Bahréin es una monarquía que cuenta con el apoyo de Estados Unidos y es sede de la Quinta flota estadounidense responsable de todas las fuerzas navales en el Golfo Pérsico. La liberación de Alkhawaja se produce justo después de las manifestaciones que se realizaron para recordar el tercer aniversario de las manifestaciones a favor de la democracia que empezaron el 14 de febrero de 2011.