El director de la CIA, John Brennan, enfrenta pedidos de renuncia tras admitir que funcionarios de la CIA espiaron a un panel del Senado que investigaba los programas de rendición y tortura de dicha agencia. La acusación se conoció en marzo cuando miembros del Comité de Inteligencia del Senado abiertamente acusaron a los funcionarios de la CIA de haber monitoreado ilegalmente las computadoras del personal. El informe del Senado aun debe ser publicado, pero se informa que documenta ampliamente los abusos y un encubrimiento de los funcionarios de la CIA en el Congreso. En ese momento, Brennan negó las acusaciones de espionaje y dijo que probaría que los que habían hecho las denuncias estaban equivocados. Pero cambió de posición esta semana después de que una averiguación interna de la CIA encontrara que hubo, en efecto, espionaje, con la participación de diez empleados de la agencia. Brennan se disculpó ante los legisladores en un comunicado emitido a principios de esta semana. La Casa Blanca apoya a Brennan, citando “la gran confianza” que tiene el presidente Obama en su liderazgo. Pero al menos dos miembros del Comité de Inteligencia del Senado, el demócrata Mark Udall de Colorado y Martin Heinrich de Nuevo México, piden su renuncia. Hablamos con el periodista que dio a conocer la aceptación por parte de la CIA de haber espiado las computadoras del Senado: Jonathan Landay, corresponsal del grupo McClatchy Newspapers en temas de seguridad nacional e inteligencia.