Cuando se produce un desastre ¿quién se beneficia? Esa es la pregunta formulada por Antony Loewenstein en su nuevo libro, “Disaster Capitalism: Making a Killing out of Catastrophe” (Capitalismo del desastre: haciendo una fortuna de la catástrofe). En sus viajes por el mundo, Loewenstein examina cómo empresas como G4S, Serco y Halliburton están ganando dinero con las calamidades y mandando contratistas con fines de lucro a zonas en guerra, construyendo centros privados de detención con fines de lucro, alojamiento para refugiados, prisioneros y gente que busca asilo. Hace poco Loewenstein se reunió con el cineasta Thor Neureiter, para realizar un documental del mismo nombre; en él relata cómo la ayuda internacional y las inversiones impactaron en las comunidades en Haití, Afganistán, Papua Nueva Guinea y otros lugares.