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El gobierno de Obama enfrenta críticas en toda América Latina por imponer a Venezuela nuevas sanciones y declarar a dicho país como “una amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional”. El sábado, los cancilleres de los doce países de América del Sur pidieron el levantamiento de las sanciones. Los cancilleres emitieron una declaración en la que afirman: “Constituye una amenaza intervencionista contra la soberanía y el principio de no interferencia en los asuntos internos de otros países”. El jueves, la política estadounidense en Venezuela también fue cuestionada durante una reunión de la Organización de los Estados Americanos (OEA) realizada en Washington DC. Representantes de México, Brasil, Colombia, Argentina y otros países criticaron el enfoque estadounidense. Hablamos con el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, que participó en la reunión de la OEA celebrada ayer. Ecuador ofreció ser mediador en un diálogo entre Estados Unidos y Venezuela.