Relacionado
La organización Human Rights Watch acusó a Arabia Saudita de usar cohetes con municiones racimo fabricados en EE.UU., en al menos siete ataques perpetrados en la ciudad yemení de Hajjah, entre abril y mediados de julio. Decenas de civiles murieron o resultaron heridos tanto durante los ataques como posteriormente con la detonación de submuniciones que no habían detonado. Ni Estados Unidos, ni Arabia Saudita ni Yemen adscribieron a la convención internacional que prohíbe el uso de municiones racimo. Kenneth Roth de Human Rights Watch criticó la postura de Estados Unidos con respecto a las municiones racimo. “Estados Unidos cree que las municiones racimo son armas legales”, afirma Roth. “Estados Unidos todavía no firmó los tratados que prohíben el uso de minas. Por lo tanto, Estados Unidos está muy retrasado con respecto al resto del mundo”.