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Está previsto que esta tarde el condenado a muerte Richard Glossip sea ejecutado. Un tribunal de Oklahoma acaba de rechazar el pedido de una nueva audiencia en el caso. En 1997, Glossip estaba trabajando como gerente de un hotel Best Budget Inn en Oklahoma cuando su jefe, Barry Van Treese, fue asesinado. Un trabajador de mantenimiento, Justin Sneed, admitió haber golpeado a Van treese hasta matarlo con un bate de béisbol, pero adujo que Glossip le había ofrecido dinero y posibilidades laborales a cambio. El caso se basó exclusivamente en las afirmaciones de Sneed. Nunca se incluyeron pruebas físicas que vincularan a Glossip con el crimen. En los últimos meses, dos hombres que estaban en la cárcel con Sneed afirmaron que Sneed había involucrado a Glossip para evitar la pena de muerte. El lunes, el tribunal determinó que la prueba “solo se basa sobre pruebas anteriormente presentadas al tribunal” y rechazó un pedido de postergación de la ejecución. Más de 240 mil personas firmaron un petitorio para que se le perdone la vida a Glossip. Se comunican con nosotros dos invitados: Don Knight, uno de los abogados ad honorem que representa al condenado a muerte Richard Glossip y la hermana Helen Prejean, una de las activistas contra la pena de muerte más conocidas del mundo. Como monja católica, Prejean empezó su ministerio en la cárcel hace más de treinta años. Es autora del exitoso libro “Pena de muerte”.
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