Se presentaron las primeras acusaciones penales en la actual crisis por la contaminación del agua de la localidad de Flint, que expuso a casi cien mil residentes a niveles venenosos de plomo. Dos empleados públicos fueron acusados de engañar al gobierno de EE.UU. en relación al problema: los empleados del Departamento de Calidad Ambiental Stephen Busch y Michael Prysby. Mientras tanto, un empleado de Flint, Michael Glasgow, es acusado de haber alterado los resultados de las pruebas de agua, mientras que el gobernador de Michigan, el republicano Rick Snyder, dijo que él no había sido interrogado por los fiscales en relación con la crisis. Los manifestantes pidieron la renuncia del gobernador Snyder por su manejo de la crisis del agua en Flint, que empezó cuando un gerente de emergencia no elegido por el voto sino designado por el gobernador Snyder, cambió la fuente de agua potable de la ciudad que provenía del sistema de Detroit al contaminado río Flint. Tras la medida, el agua corroyó las antiguas cañerías de Flint, haciendo que el plomo se filtrara al agua potable. Escuchamos los comentarios de Curt Guyette, periodista de investigación de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles de Michigan que contribuyó a dar a conocer la crisis. Su trabajo se concentra en el manejo de la emergencia y el gobierno abierto. Guyette acaba de ganar el premio Hillman al Periodismo en el Internet, así como el premio Aronson por informe pionero destacado.