Titulares18 de mayo de 2016

El senador de Vermont Bernie Sanders ganó la primaria demócrata en Oregon, mientras que Hillary Clinton declaró su victoria en Kentucky. Con el informe de 99% de los distritos electorales, Clinton supera a su contendiente por 0,5%. Sanders agradeció a sus partidarios en ambos estados.

Sanders expresó: “Permítanme aprovechar esta oportunidad para agradecer al pueblo de Kentucky. En una primaria cerrada –algo con lo que no estoy de acuerdo–, donde no se permite votar a los independientes, donde la secretaria Clinton venció a Barack Obama en 2008 por 250.000 votos, parece que esta noche vamos a terminar obteniendo cerca de la mitad de los delegados de Kentucky”.

Mientras tanto, Donald Trump está un paso más cerca de cimentar la nominación republicana. Se proyecta que habría obtenido 70% de los votos en Oregon, donde Ted Cruz y John Kasich aparecieron en las listas, aun cuando habían retirado sus candidaturas. Visite democracynow.org/es para ver nuestra cobertura de Trump y los resultados.

La victoria de Bernie Sanders en Oregon se produjo en medio de tensiones dentro del Partido Demócrata, luego de que el sábado, partidarios del senador de Vermont protestaran irrumpiendo en la convención de Nevada, afirmando que las reglas fueron modificadas abruptamente y que a 64 partidarios de Sanders se les denegó el estado de delegado. En última instancia, Clinton ganó 20 delegados comprometidos, mientras que Sanders obtuvo 15. La presidenta estatal del partido, Roberta Lange, denunció que recibió amenazas de muerte mientras la sede del partido era vandalizada. El líder de la minoría del Senado, Harry Reid, urgió a Sanders a condenar la conducta de algunos de sus partidarios y afirmó que éste se enfrentaba a una “prueba de liderazgo”. En una declaración, Sanders rechazó la violencia y destacó que durante la campaña en Nevada se produjeron disparos contra la oficina de su campaña en el estado, y que el complejo de vivienda que utiliza su personal había sido saqueado. También acusó al liderazgo demócrata de Nevada de “[usar] su poder para evitar un proceso justo y transparente” en las convenciones del sábado. Visite democracynow.org/es para ver nuestra cobertura de Sanders.

Una ola de violencia ha causado la muerte de más de 200 personas durante la semana pasada en Bagdad, la capital de Irak. El martes, al menos 70 personas murieron en una serie de atentados, entre ellos el ataque a un mercado en el importante distrito chií de Al-Shaab. El autoproclamado Estado Islámico (ISIS) se atribuyó la responsabilidad de ese ataque.

El senado aprobó un proyecto de ley que permitirá a los familiares de las víctimas del atentado del 11 de septiembre de 2001 demandar a Arabia Saudí por cualquier papel que haya podido tener en los ataques. Al mismo tiempo, el gobierno de Barack Obama se enfrenta a renovada presión para desclasificar 28 páginas del informe sobre este atentado, que presuntamente contienen detalles sobre el papel que jugó Arabia Saudí. Ese país ha amenazado con vender unos 750.000 millones en valores del Tesoro y otros bienes estadounidenses si se llegara a aprobar la medida. El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, se opuso a la ley.

Earnest declaró: “Esta legislación cambiaría el derecho internacional de larga data respecto a la inmunidad soberana, y el presidente de Estados Unidos sigue albergando graves preocupaciones de que esta legislación haría a Estados Unidos vulnerable en otros sistemas jurídicos del mundo”.

La Casa Blanca amenazó con vetar un proyecto de ley de gastos militares que protege al Pentágono de recortes de presupuesto. El proyecto de la Cámara de Representantes de la más reciente Ley de Autorización de Defensa Nacional también incluye barreras para cerrar la cárcel de la bahía de Guantánamo y medidas que, según la Casa Blanca, permiten la discriminación contra personas LGTB. Esto se produce al tiempo que el Senado confirmó a Eric Fanning como secretario del Ejército, convirtiéndolo en el primer homosexual declarado en asumir el liderazgo de un servicio militar estadounidense.

El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, propuso legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en todo el país. Actualmente es legal solo en algunos estados y en Ciudad de México. Peña Nieto se refirió a ese tema durante el Día Internacional contra la Homofobia.

El presidente Enrique Peña Nieto afirmó: “[Se trata de] reconocer como un derecho humano que las personas puedan contraer matrimonio sin discriminación alguna. Es decir, que los matrimonios se realicen sin discriminación por motivos de origen étnico o nacional, de discapacidad, de condición social, de condiciones de salud, de religión, de género o preferencias sexuales”.

Esto ocurrió al tiempo que el presidente Peña Nieto enfrenta nuevas presiones por la desaparición de 43 estudiantes en México en septiembre de 2014. Múltiples informes señalan la participación de autoridades federales y siembran dudas en torno a la versión de México, que sostiene que los estudiantes fueron asesinados por miembros de un cártel de drogas. El lunes, Antonio Tizapa, padre de uno de los estudiantes desaparecidos, rompió a llorar mientras efectuaba una declaración ante el Foro Permanente para Cuestiones Indígenas de la ONU. Tizapa solicitó que la relatora especial de la ONU visite México.

Antonio Tizapa expresó: “Diecinueve meses exigiendo la aparición con vida, diecinueve meses pidiendo justicia. Y esperamos la visita a México de la relatora especial de Derechos de los Pueblos Indígenas de la ONU, Victoria Tauli-Corpus, para la resolución del conflicto de 43 familias y para encontrar paz, aunque sabemos que no son solo 43, son miles y miles”.

En Nigeria, un sindicato que representa a millones de trabajadores inició una huelga general. La coalición sindical Nigeria Labour Congress anunció la huelga, en contra del incremento de los precios del combustible proyectado por el Gobierno.

En Francia, unas 220.000 personas se lanzaron a las calles en todo el país para protestar en contra de las reformas laborales impulsadas por el presidente François Hollande. Mediante estas medidas se recortaría el pago por horas extras para los conductores de camiones y se facilitaría el despido de trabajadores por parte de las empresas. El martes, conductores de camiones obstruyeron carreteras, mientras que la policía lanzó gases lacrimógenos y disparó cañones de agua. 87 personas fueron arrestadas. Arlette Perray participó en las manifestaciones en París.

Arlette Perray sostuvo: “Es una ley desastrosa. No hemos tenido algo así en más de 70 años. Destruye los derechos de los trabajadores y los jubilados, así como el futuro de los jóvenes. Soy jubilada y mi lugar está aquí, junto a los trabajadores y a los jóvenes”.

Aquí, en Estados Unidos, millones de trabajadores podrían adquirir el derecho al pago de horas extras, en virtud de una nueva normativa que será revelada hoy por el gobierno de Barack Obama. La normativa permite que los empleados de tiempo completo cobren horas extras si perciben hasta aproximadamente 47.000 dólares por año, cifra que asciende a más del doble del tope actual. Alrededor de 35% de los empleados asalariados tendrán derecho a recibir una remuneración correspondiente a una hora y media por cada hora extra trabajada, mientras que actualmente quienes cuentan con ese derecho son el 7%.

En Chile, la Corte Suprema de Justicia solicitó a Estados Unidos la extradición de tres exagentes que trabajaron para la dictadura militar de Augusto Pinochet. Pinochet tomó el poder mediante un golpe de Estado que contó con apoyo de Estados Unidos y que derrocó al presidente democráticamente electo Salvador Allende en 1973. Los tres exagentes están acusados de haber participado en la detención, tortura y asesinato del diplomático español-chileno de la ONU Carmelo Soria en 1976.

Y en California, una compañía cuyo oleoducto se incendió cerca de Santa Bárbara el año pasado, provocando el derrame de unos 550.000 litros de crudo, fue declarada culpable de decenas de cargos penales, entre ellos, cuatro por delitos graves. Plains All American Pipeline podría enfrentarse a 2,8 millones de dólares en multas, una ínfima fracción de los 43.000 millones de dólares en ingresos que declaró el año pasado, antes del derrame. Un empleado de la compañía enfrenta también tres cargos, por un delito menor.