El jueves, mientras delegados y trabajadores de los medios de comunicación ingresaban en fila al estadio Quicken Loans antes de la gran noche de Donald Trump, un grupo de jóvenes de Cleveland se reunió cerca de la entrada a la Convención Nacional Republicana, para protestar contra las prioridades del Partido Republicano. Los jóvenes afirman que la ciudad fue diezmada por dichas prioridades: políticas económicas que dejaron miles de desempleados y barrios arruinados, discriminación racial que hizo de Cleveland una de las ciudades más segregadas de EE.UU. y una fuerza policial que de manera infame asesinó a Tamir Rice solo dos segundos después de haber estacionado el coche cerca del niño afroestadounidense que sostenía un arma de aire comprimido. Hablamos con los manifestantes mientras levantaban carteles que mostraban mensajes en Twitter con críticas a estas políticas.