En la zona norte del estado de Nueva York, el presunto suicidio de John McKenzie, un preso de setenta años de edad, ha suscitado la atención en torno a la negativa del estado a liberar a los presos ancianos con bajo riesgo de reincidencia. Según se informa, McKenzie se ahorcó en la celda que ocupaba en el Establecimiento Correccional FishKill, después de que le negaran la libertad bajo palabra la semana pasada. Fue la décima negativa a la libertad bajo palabra desde que empezó a tener derechos a ella en el año 2000. Hablamos con Kathy Manley, abogada de larga trayectoria y defensora de los derechos de los presos, que representaba a John McKenzie en el juicio contra el Consejo de Libertad bajo Palabra del estado de Nueva York. Y acá en Nueva York, hablamos con Mujahid Farid, un organizador destacado de la campaña Release Aging People in Prison (Dejen en libertad a los presos ancianos). Farid, fundó el grupo después de que fuera liberado en el año 2011, tras pasar treinta y tres años en la cárcel por una condena que iba de 15 años a perpetua.