Titulares20 de febrero de 2017

John Kelly, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, redactó nuevas directrices de gran alcance con el objetivo de acelerar la deportación masiva de inmigrantes indocumentados que viven actualmente en Estados Unidos. Los memorandos dan instrucciones a las agencias federales para que comiencen la contratación de 10.000 agentes de Inmigración y Control de Aduanas y de 5.000 agentes fronterizos adicionales. También incluyen planes detallados para acelerar las audiencias de deportación y aumentar la cantidad de personas con prioridad para ser expulsadas de Estados Unidos. El medio de comunicación McClatchy informa que cientos de miles de inmigrantes indocumentados adicionales que viven en Estados Unidos estarían sujetos a lo que se conoce como un proceso acelerado de deportación con el objetivo de sacarlos rápidamente del país. Según McClatchy, los niños que llegaron a Estados Unidos como “menores sin acompañamiento” también podrían ser deportados y sus padres podrían enfrentar cargos penales en caso de haber pagado a traficantes de personas para que hagan pasar a sus hijos por la frontera. El presidente Donald Trump también afirmó que se está preparando para firmar una nueva orden ejecutiva que prohíbe el ingreso a Estados Unidos de los ciudadanos de siete países con mayoría musulmana, aunque los funcionarios de la Casa Blanca afirman que la nueva prohibición migratoria no incluirá a los titulares de visas o tarjetas verdes.

Un juez de Seattle se negó a ordenar la liberación de Daniel Ramírez Medina, de 23 años, arrestado por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por su sigla en inglés), a pesar de que el joven tiene permiso para vivir y trabajar en Estados Unidos en el marco del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, conocido como DACA, aprobado por el expresidente Barack Obama. Los defensores de los derechos de Ramírez protestaron frente al edificio donde se realizaba la audiencia el viernes. Estas son las palabras de Paul Quinones, de la organización Washington Dream Act Coalition.

Paul Quinones expresó: “Si alguno de nosotros tenía alguna duda de que el régimen de Trump iba a declarar una guerra sin tregua, una temporada de caza contra todos los inmigrantes que viven en este país, esa duda ya se disipó. Con el arresto de Daniel nos hemos dado cuenta de que el gobierno federal no cumple con sus promesas y nos demuestra que no podemos confiar en él”.

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Dos miembros del caucus hispano del Congreso de Estados Unidos afirman que legisladores republicanos los obligaron a retirarse de una reunión con funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés) el jueves. El congresista demócrata de Illinois Luis Gutiérrez y la congresista demócrata de California Norma Torres rezaron por las familias de inmigrantes cuando se los expulsó de la reunión con el director interino del ICE, Thomas Homan, con motivo de la reciente ola de redadas llevadas a cabo por el organismo. Gutiérrez afirmó luego: “En más de 20 años, nunca escuché que los republicanos pudieran controlar qué reuniones pueden tener los demócratas con funcionarios del Poder Ejecutivo, y nunca un miembro del personal me había pedido que me retirara de una reunión a la que tengo derecho a asistir”.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, continuó intensificando lo que denomina una “guerra contra los medios” en un acto de campaña para 2020 que se celebró en Florida el sábado, solo un día después de que tuiteara que los medios son “el enemigo de los estadounidenses”. Estas son las palabras que Trump dirigió a una multitud de alrededor de 7.000 personas en Melbourne, Florida.

El presidente Donald Trump dijo: “Thomas Jefferson, Andrew Jackson y Abraham Lincoln, y muchos de nuestros presidentes más importantes, lucharon contra los medios y los desafiaron muchas veces a causa de sus mentiras. Cuando los medios les mienten a las personas, no dejaré nunca que se salgan con la suya. Tienen sus propios planes. Y esos planes no son los planes de ustedes”.

De hecho, si bien Jefferson arremetía a menudo contra los medios, también creía que eran fundamentales para la democracia y, tal como se conoce ampliamente, en 1823 le escribió al Marqués de Lafayette: “La seguridad yace en una prensa libre”. Trump mintió o tergiversó las estadísticas en varias oportunidades durante el acto de campaña que se llevó a cabo el sábado, e incluso se acreditó la creación de empleos que se generaron durante el gobierno de su predecesor Barack Obama. Una vez más, exageró las tasas de delitos en Estados Unidos y mintió al afirmar que actualmente no se investiga a los refugiados que son admitidos en ese país, cuando de hecho los refugiados deben someterse a un proceso exhaustivo de escrutinio que lleva dos años. Durante su discurso, Trump también pareció inventar un ataque terrorista imaginario en Suecia.

El presidente Donald Trump sostuvo: “Este es el resultado. Debemos mantener a nuestro país a salvo. Ya ven lo que está sucediendo. Debemos mantener nuestro país a salvo. Ya ven lo que está sucediendo en Alemania, lo que sucedió anoche en Suecia. Suecia, quién lo creería. Suecia”.

Este comentario desató críticas y burlas generalizadas, incluso de parte del ex primer ministro sueco Carl Bildt, quien publicó en Twitter: “¿Suecia? ¿Ataque terrorista? ¿Qué estuvo fumando? Muchas preguntas”. Trump dijo luego que el comentario sobre Suecia se debió a una noticia de Fox News que había visto la noche anterior sobre los supuestos delitos relacionados con los refugiados. No obstante, la tasa de delitos de Suecia se ha reducido en la última década, incluso luego de que ese país aceptara a cientos de miles de refugiados, provenientes, entre otras partes, de Siria.

El acto del presidente estadounidense Donald Trump en Florida se produjo luego de que el mandatario enfrentara duras críticas todo el sábado de parte del senador de Arizona John McCain, entre otros, por haber tuiteado el viernes por la noche: “Los medios de NOTICIAS FALSAS (los fracasados @nytimes, @NBCNews, @ABC, @CBS, @CNN) no son mi enemigo, son el enemigo de los estadounidenses”. Estas son las palabras de McCain en una entrevista con Chuck Todd en el programa de NBC “Meet the Press”.

El senador John McCain declaró: “Una parte fundamental de este nuevo orden mundial era una prensa libre. Odio la prensa. Los odio a ustedes específicamente. Pero el hecho es que los necesitamos. Necesitamos una prensa libre. Debemos tenerla. Es esencial. Si quieres preservar –estoy hablando en serio ahora–, si quieres preservar la democracia tal como la conocemos, debes tener una prensa libre, y muchas veces debes tenerla en contra. Sin ella, me temo que con el tiempo perderíamos gran parte de nuestras libertadas individuales. Así es como comienzan los dictadores”.

Estas fueron las palabras del senador republicano de Arizona John McCain. Periodistas y editores también repudiaron el comentario de Trump. Gabriel Sherman, editor de asuntos nacionales de la revista New York Magazine, se refirió a esos comentarios como “propios de un dictador”. El presentador de Fox News Chris Wallace dijo que el comentario de Trump “cruza una línea importante”.

Continúan las manifestaciones contra el presidente Donald Trump en todo Estados Unidos y el mundo, mientras miles de manifestantes toman las calles de Estados Unidos durante el fin de semana. En la ciudad de Nueva York, los activistas marcharon junto a una banda musical con un ataúd y parodiaron un funeral para la presidencia, al estilo de Nueva Orleans. En Washington DC, manifestantes LGBT se besaron frente al hotel de Trump para protestar contra las políticas contrarias a los derechos de las personas LGBT del gobierno del presidente. Multitudes también inundaron las calles de Chicago, Dallas, Minneapolis, a lo largo de la frontera de Estados Unidos y México y en Los Ángeles, para oponerse a las duras medidas de Trump contra la inmigración y los inmigrantes que viven actualmente en Estados Unidos.

Una manifestante expresó: “Bueno, mi mamá es una inmigrante actualmente, y siento que necesito hacer esto por ella, para que obtenga los derechos que necesita, porque todo este tiempo estuvo trabajando duro para mantenernos, y por supuesto que es parte de este país como todos nosotros, y estoy aquí luchando por ella y por mi padre”.

Las protestas del fin de semana ocurrieron después del día de acción coordinado del viernes, al que se dio el nombre de “Huelga general del 17 de febrero”, que produjo unas 100 manifestaciones en todo Estados Unidos. Los organizadores del grupo Strike4Democracy (“Huelga por la democracia”, en español) afirman que participaron cerca de 100.000 personas en todo el país.

En Reino Unido, se espera que unas 10.000 personas se unan hoy a una protesta en contra del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mientras el Parlamento británico sostiene un debate en torno a cancelar la visita de Estado de Trump a su país. Casi dos millones de británicos han firmado una petición pidiendo que esa visita sea cancelada. Esta es Tulip Siddiq, miembro del Parlamento británico.

Tulip Siddiq declaró: “Este es el hombre que ha metido en el mismo saco a las comunidades musulmanas de siete países diferentes. Si le permitimos a Donald Trump realizar una visita de Estado, ¿qué tipo de mensaje les estamos dando a las generaciones futuras? La historia nos juzgará si le permitimos a este hombre venir a nuestro país sin hacerle preguntas primero”.

En España, aproximadamente 160.000 personas salieron a las calles de Barcelona el sábado para exigirle al gobierno que reciba más refugiados. Esta es Meera Zaroor, una refugiada siria que vive en Barcelona.

Meera Zaroor expresó: “Las personas podrían intentar dejarnos olvidar el dolor que sentimos por perder la gente que hemos perdido en Siria, y pensar en nosotros como personas, no como crisis. Porque no somos crisis y tampoco vinimos aquí para robarle a la gente sus hogares, sus trabajos y todo eso. Vinimos aquí no porque queríamos, sino para vivir en un sitio muy seguro, porque no lo tenemos en Siria”.

En más noticias de Estados Unidos, el viernes se le tomó juramento a Scott Pruitt como director de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por su sigla en inglés), después de que el Senado votara su confirmación con 52 votos contra 46. Su confirmación se produjo pese a la fuerte oposición de ambientalistas, demócratas del Senado y miembros de la propia EPA, quienes afirman que temen que Pruitt oculte hallazgos científicos y socave su trabajo, y que el gobierno de Trump pueda incluso intentar eliminar la EPA por completo. Cuando se desempeñaba como fiscal general de Oklahoma, Pruitt demandó a la EPA 14 veces. Su confirmación y juramento se produjeron al día siguiente de que un juez de distrito le ordenara a la oficina anterior de Pruitt que presente miles de páginas de correspondencia con empresas de petróleo, carbón y gas.

Durante el fin de semana, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se reunió con cuatro posibles candidatos para el cargo de consejero de Seguridad Nacional. Se trata del ex embajador ante las Naciones Unidas John Bolton, el teniente general H. R. McMaster, el teniente general Robert Caslen Jr. y el general retirado Keith Kellogg, quien se desempeña actualmente como consejero de Seguridad Nacional interino. Las reuniones tuvieron lugar después de que el general Flynn dimitiera del cargo la semana pasada, a raíz de la llamada telefónica que mantuvo en diciembre con el embajador ruso, con quien habló sobre las sanciones impuestas por Estados Unidos a Rusia, y de que la persona a quien Trump seleccionó para sustituirlo, el vicealmirante Robert Harward, rechazara el cargo y presuntamente le dijera a un amigo que la oferta era un “sándwich de m***”.

La búsqueda del presidente Donald Trump de un reemplazo para Michael Flynn para el cargo de consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos se produce al tiempo que la Casa Blanca sigue teniendo una drástica escasez de personal. Una investigación del periódico The New York Times informa que Trump ha tenido dificultades no solo para completar su Gabinete –en el que aún hay seis miembros sin confirmar–, sino también para ocupar los importantes puestos de secretarios adjuntos, subsecretarios y ayudantes de secretarios de la mayoría de las agencias. El periódico informa que una de las principales barreras es que Trump vetó a los nuevos candidatos –e incluso despidió a los funcionarios existentes– que lo han criticado en lo más mínimo. El viernes, por ejemplo, Craig Deare, recientemente nombrado director de la división del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, fue despedido y abandonó su oficina menos de 24 horas después de que criticara las políticas de Trump sobre América Latina durante una charla privada en el Wilson Center, en Washington DC. El despido de Deare se suma a los de seis altos funcionarios del Departamento de Estado que han sido despedidos recientemente por preocupaciones sobre su lealtad.

Dos de los hijos de Trump, Eric Trump y Donald Trump Jr., asistieron a la gran inauguración del Trump International Golf Club en Dubái el sábado por la noche, junto a su asociado comercial Hussain Sajwani, un multimillonario de Dubái. Este club de golf es el primero de una serie de proyectos de alto perfil que los negocios de Trump, ahora dirigidos por sus hijos adultos, tienen programado abrir mientras Donald Trump ocupe el cargo de presidente de Estados Unidos, una situación que plantea posibles conflictos de intereses. Estas son las palabras de Donald Trump Jr. en la apertura del sábado.

Donald Trump Jr. enunció: “Muchísimas gracias. Es increíble estar aquí viendo este edificio impresionante después de todos estos años. Les agradezco enormemente la amistad, la alianza. Ali, Abbas, Mehdi: muchas gracias, espero trabajar con ustedes por muchos años”.

En Somalia, un coche bomba suicida provocó la muerte de al menos 39 personas e hirió a otras 50 al estallar en un mercado en Mogadiscio el domingo. Este es uno de los testigos.

Un testigo expresó: “Hoy quedé alterado al ver a la gente llorando de dolor y otros tumbados en el suelo, heridos. Otros ya estaban muertos por el coche bomba que explotó en el centro del mercado. Los heridos y asesinados eran comerciantes, farmacéuticos y carniceros”.

Ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del ataque, aunque el presidente de Somalia culpó al grupo miliciano Al Shabab.

El domingo, en Irak, las fuerzas iraquíes respaldadas por Estados Unidos lanzaron una campaña para retomar el oeste de Mosul de manos del autoproclamado Estado Islámico (ISIS), mientras Estados Unidos aumentaba los ataques aéreos contra los milicianos de la ciudad. Grupos de derechos humanos advierten de un “riesgo extremo” para los 650.000 civiles en la parte occidental de la ciudad. La campaña para retomar Mosul comenzó inicialmente en octubre.

El ministro de Asuntos Exteriores de Irán le advirtió a Estados Unidos que no envíe más tropas terrestres a Siria, tras un informe de la cadena de televisión CNN que dice que el Pentágono está considerando un plan para desplegar una gran fuerza convencional en Siria. Irán ha respaldado al presidente sirio, Bashar al Assad, mientras que Estados Unidos ha atacado al ISIS pero al mismo tiempo ha ofrecido entrenamiento y apoyo a las fuerzas que combaten a Assad. En una entrevista con Christiane Amanpour, de CNN, el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Mohammad Javad Zarif, dijo que la presencia de más tropas estadounidenses en Siria alimentará el extremismo.

Mohammad Javad Zarif declaró: “Creo que la presencia de tropas extranjeras en un territorio árabe, contra el deseo del gobierno y del pueblo de esos territorios, es en sí misma una receta para que estos demagogos, estos extremistas, se reúnan en torno a ella y obtengan más apoyo y recluten nuevos combatientes, jóvenes marginados que se han visto privados de su dignidad debido a ciertas políticas que se han seguido”.

Y en Múnich, Alemania, más de mil activistas en contra de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) se manifestaron frente al lugar donde se llevaba a cabo la Conferencia de Seguridad de Múnich, a la que asistieron el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y otros altos líderes. Los manifestantes exigieron el fin de lo que califican de “economía de guerra”. Unos 4.000 oficiales de policía fueron desplegados para vigilar la protesta.