Y en Malta, los legisladores aprobaron el miércoles con abrumadora mayoría la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo en esta república insular del Mediterráneo.
El primer ministro Joseph Muscat expresó: “Creo que es una votación histórica, que muestra que nuestra democracia y nuestra sociedad están madurando. Se ha alcanzado un nivel de madurez sin precedentes y es una sociedad en la que todos podemos decir que somos iguales”.
Malta es un país donde predomina la religión católica romana, que ha visto en los últimos años un rápido cambio que se aleja de sus raíces conservadoras. Hasta 2011, Malta era uno de los tres países en el mundo donde el divorcio era ilegal.