El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, se comprometió a continuar con su sangrienta guerra contra el narcotráfico durante su discurso sobre el Estado de la Nación, pronunciado el lunes.
El presidente Rodrigo Duterte afirmó: “La lucha será incesante e implacable. A pesar de las presiones internacionales y locales, la lucha continuará hasta que los responsables entiendan que tienen que detenerse, tienen que detenerse o elegir entre la cárcel y el infierno”.
Vigilantes parapoliciales y miembros de las fuerzas de seguridad filipinas han asesinado a más de 7.000 personas sospechosas de ser usuarios o vendedores de drogas desde que Duterte dio inicio a la llamada guerra contra el narcotráfico hace un año. Durante su discurso, Duterte atacó a varios medios filipinos, entre ellos el popular sitio web Rappler, al que acusó falsamente de ser de propiedad estadounidense. El domingo, el Congreso de Filipinas también concedió el pedido de Duterte de extender hasta fin de año la ley marcial vigente en la región sureña de Mindanao.