El martes, en México, se produjo un terremoto de magnitud 7,1 unos 160 kilómetros al sureste de Ciudad de México, donde se derrumbaron decenas de edificios alrededor de la capital y quedaron estudiantes, trabajadores y habitantes bajo los escombros. El gobierno mexicano informó esta mañana que han muerto al menos 217 personas, pero se espera que esta cifra aumente a medida que los rescatistas, que trabajan con perros rastreadores, se introducen entre los escombros. Entre los fallecidos se encuentran por lo menos 21 estudiantes de una escuela primaria del sur de Ciudad de México y 15 fieles que murieron durante una misa católica, cuando el terremoto desencadenó la erupción de un volcán al sureste de la ciudad. El desastre ocurrió horas después de que se hiciera un simulacro de preparación para terremotos en conmemoración del aniversario número 32 de un terremoto de 1985 que dejó un saldo de 5.000 muertos. También se produjo menos de dos semanas después del terremoto más potente en un siglo cerca de la costa del estado sureño de Oaxaca, donde fallecieron al menos 90 personas y se derrumbaron miles de hogares.
En el Caribe, el huracán María azotó el territorio estadounidense de Puerto Rico esta mañana como una importante tormenta de categoría 4; se trata del huracán más potente en la zona desde 1928. El ojo de la tormenta tocó tierra en el sur de la isla y se encamina hacia la capital, San Juan, donde residen 400.000 personas. Durante la noche, el huracán María pasó por las Islas Vírgenes de Estados Unidos, donde amenazó con convertir los escombros que quedaron tras el huracán Irma en proyectiles letales. En Dominica, por donde pasó el huracán María el lunes, más del 90% de la infraestructura quedó dañada o destruida, en lo que el primer ministro calificó como una devastación “sobrecogedora”. Visite democracynow.org/es para ver más información sobre el huracán María y el terremoto en México.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pronunció su primer discurso ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas el martes, en el que alardeó sobre el tamaño del Ejército estadounidense, advirtió que se retiraría del acuerdo nuclear de Irán, insinuó una intervención en Venezuela y amenazó con “destruir totalmente” Corea del Norte. El discurso, de cuarenta minutos de duración, habría sido escrito presuntamente por el asesor principal de Trump, Stephen Miller, y no criticó a otros países autoritarios que son aliados de Estados Unidos; entre ellos, Egipto, Turquía y Arabia Saudí. Entre sus numerosas amenazas, en la más incisiva Trump llamó al líder norcoreano Kim Jong-Un “hombre cohete” y dijo que Estados Unidos estaba preparado para destruir a un país entero de 25 millones de habitantes.
El presidente Donald Trump enunció: “Estados Unidos tiene mucha fuerza y paciencia, pero si se ve obligado a defenderse, ya sea a sí mismo o a sus aliados, no tendrá más remedio que destruir totalmente a Corea del Norte. El hombre cohete se embarcó en una misión suicida para sí mismo y para su régimen”.
El embajador de Corea del Norte se retiró de la Asamblea General cuando Trump subió al podio. El gobierno de Irán condenó las declaraciones de Trump, a las que calificó de “descaradas e ignorantes”, mientras que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, declaró desde Caracas que Trump es el “nuevo Hitler” de la política internacional.
El discurso de Donald Trump en la Organización de las Naciones Unidas se produjo al día siguiente de que el Senado de Estados Unidos aprobara, por 89 votos contra 8, un proyecto de ley que otorgaría 700.000 millones de dólares para financiar las guerras estadounidenses y el Pentágono. La Ley de Autorización de Defensa Nacional para el año fiscal 2018 aumentaría el gasto militar en 80.000 millones de dólares anuales, mucho más que el aumento de 54.000 millones de dólares que solicitó el presidente Trump. Los críticos señalan que el aumento del gasto militar es casi el doble del costo de un proyecto de ley patrocinado por el senador de Vermont, Bernie Sanders, que permitiría que las universidades públicas estadounidenses no cobraran matrícula.
En Siria, un mínimo de tres hospitales fueron víctimas de ataques aéreos el martes en la provincia de Idlib, que se encuentra bajo el control de los rebeldes. Los ataques causaron la muerte de trabajadores de la salud y cortaron el acceso a la atención médica para miles de habitantes. Los residentes señalaron que los culpables de los ataques fueron aviones de guerra rusos o sirios. Mientras tanto, la batalla continúa en Raqqa, donde el observatorio periodístico local Raqqa Está Siendo Masacrada en Silencio informa que en los últimos días los ataques aéreos de la coalición dirigida por Estados Unidos han caído sobre la mezquita de Al-Shomati y una universidad en Raqqa.
En Nigeria, la Organización de las Naciones Unidas advierte sobre un nuevo brote de cólera en el estado de Borno, por el que han fallecido al menos 44 personas y se encuentran enfermas aproximadamente 2.300. Las Naciones Unidas sostienen que la enfermedad, que se transmite por el agua, se propaga rápidamente debido a las pésimas condiciones en los campos a los que fueron desplazadas 1.800.000 personas a causa de los combates entre el gobierno nigeriano y Boko Haram. Este nuevo brote se produce al tiempo que la Organización Mundial de la Salud afirma que la cantidad de casos de cólera en Yemen asciende a 700.000 y se sospecha que 40.000 personas más habrían contraído la enfermedad sólo la semana pasada. Además, distintos grupos expertos en asuntos sanitarios advierten que Haití podría enfrentar nuevos casos de cólera debido a las inundaciones producidas por los huracanes Irma y María.
En Birmania, la líder de facto del país y galardonada con el Premio Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi, rompió el silencio el martes y habló sobre la grave situación de la minoría rohingya musulmana, luego de que más de 400.000 refugiados cruzaran la frontera hacia el vecino Bangladesh en las últimas semanas para huir de la violencia que cuenta con el apoyo del gobierno. Durante su discurso, Suu Kyi se negó a criticar el comportamiento del ejército birmano, que según la Organización de las Naciones Unidas es “un ejemplo claro de depuración étnica”.
Aung San Suu Kyi sostuvo: “Entiendo que a muchos de nuestros amigos de todo el mundo les preocupan las denuncias de que se están incendiando pueblos enteros y que hordas de refugiados están huyendo del país. No ha habido conflictos desde el 5 de septiembre y no hay ninguna operación de depuración. Nosotros también estamos preocupados. Queremos saber cuáles son los problemas en realidad. Ha habido denuncias y contradenuncias, y tenemos que escuchar a todas las partes. Antes de actuar, debemos asegurarnos de que estas denuncias estén fundamentadas en pruebas sólidas”.
Como respuesta, Amnistía Internacional afirmó en una declaración: “Aung San Suu Kyi demostró en el día de hoy que ella y su gobierno continúan poniendo sus cabezas debajo de la arena y no ven los horrores que están teniendo lugar en el estado de Rakhine. Por momentos, su discurso parecía una mezcla de mentiras y de culpabilización de las víctimas”. Visite www.democracynow.org/es para ver más información sobre la crisis en Birmania.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, afirmó que su par de Estados Unidos, Donald Trump, lo llamó la semana pasada para disculparse luego de que un gran jurado procesara a 15 integrantes del equipo de seguridad de Erdogan por atacar a un grupo de manifestantes pacíficos en Washington DC en mayo. Imágenes de lo sucedido muestran cómo el presidente Erdogan se queda mirando el ataque frente a la residencia del embajador turco, que se produjo justo después de que Trump le diera la bienvenida a la Casa Blanca. Estas son las palabras de Erdogan en una entrevista con “PBS NewsHour”.
El presidente Recep Tayyip Erdogan expresó: “Lo lamento mucho. En realidad, el presidente Trump me llamó hace aproximadamente una semana por este asunto. Dijo que lo lamentaba y que haría un seguimiento del tema cuando vayamos a Estados Unidos para una visita oficial. Los manifestantes nos estaban insultando y gritando. La policía no intervino de forma adecuada”.
No queda claro si fue Erdogan quien ordenó el ataque, el cual dejó a nueve manifestantes contrarios al presidente turco hospitalizados.
En noticias relativas a la privacidad en Estados Unidos, la empresa de monitoreo crediticio Equifax admitió que una falla de seguridad expuso información personal a hackers en marzo. Esta última violación de datos es distinta a la anunciada a comienzos de este mes, la cual había expuesto la información privada de 143 millones de personas. La violación de datos más reciente, que perjudicó los registros tributarios de empleados, podría generar la adulteración en serie de declaraciones fiscales y el posible robo de reintegros fiscales por parte de ladrones de identidad. Documentos públicos indican que Equifax destinó 1.100.000 dólares el año pasado, y más de 500.000 dólares en lo que va de este año, para presionar al Congreso para que apruebe una ley que limite la cantidad de dinero que la empresa se vería obligada a pagar por la violación de datos.
Y en la ciudad de Nueva York, tres miembros demócratas del Congreso se encuentran entre los diez activistas que fueron arrestados el martes en una acción pacífica de desobediencia civil frente a la Torre Trump, cuando protestaban contra el plan del presidente Donald Trump de rescindir el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por su sigla en inglés), el cual protege a 800.000 jóvenes inmigrantes de ser deportados. Entre los arrestados se encuentran los congresistas Luis Gutiérrez, de Illinois, y Raúl Grijalva, de Arizona.
El representante Luis Gutiérrez dijo: “Nos dirigimos a la residencia de Donald Trump aquí en la ciudad de Nueva York, y vamos a denunciar el fin del DACA y a demandar justicia por nuestra comunidad inmigrante, y exigir que [Trump] ponga fin a sus ataques xenofóbicos de la supremacía blanca contra nuestra comunidad”.
El representante Raúl Grijalva agregó: “Hay que dejar las cosas claras. El punto es que necesitamos una nueva ley DREAM inmediatamente,y esto es urgente”.
Melissa Mark-Viverito sostuvo: “Aquí estamos unidos. No vamos a permitir que políticas intolerantes destrocen a nuestras familias. Este país no funciona así, y no es lo que apoya esta nación”.
Estas últimas fueron las palabras de Melissa Mark-Viverito, presidenta del Concejo de la Ciudad de Nueva York, que también fue arrestada el martes, junto con el congresista neoyorquino Adriano Espaillat, durante la acción pacífica de desobediencia civil frente a la Torre Trump. Visite democracynow.org/es para acceder a un informe completo de Democracy Now! sobre la protesta del martes en defensa del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia y los indocumentados que son sus beneficiarios, conocidos como DREAMers, además de una entrevista con el congresista Luis Gutiérrez.