El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió que la brutal operación militar birmana contra los musulmanes rohingya está a punto de convertirse en una campaña de limpieza étnica, mientras la violencia contra dicho grupo minoritario largamente perseguido continua. La ONU afirma que en los últimos doce día, casi 150 mil rohingya huyeron de Birmania, país predominantemente budista, a la vecina Bangladesh, desde el inicio de la operación militar. Además, se espera que unas quince mil personas más huyan por día esta semana. Defensores de la minoría afirman que cerca de ochocientos civiles rohingya, entre ellos mujeres y niños, fueron asesinados en los últimos días.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que les hicimos (en inglés) a Tun Khin y Richard Weir. Khin es presidente de la Organización de birmanos rohingya, en el Reino Unido. Nació y creció en el estado de Arakan, Birmania. En el año 1982, quedó virtualmente sin estado junto a un millón de personas pertenecientes a la etnia rohingya de acuerdo a la nueva ley de nacionalidad. Weir es miembro de la División Asia que cubre Birmania en Human Rights Watch.