El ex principal estratega del presidente Trump, Steve Bannon, dijo que su ex jefe no estaba nada preparado para la presidencia y pronosticó que el gobierno del presidente Trump podría desmoronarse cuando el fiscal especial Robert Mueller halle pruebas de lavado de dinero, y acusó a Donald Trump Junior de “traición” por la reunión que mantuvo en 2016 con funcionarios rusos en la Trump Tower. Esta información fue tomada de fragmentos altamente controversiales del nuevo libro Fuego y furia, del periodista Michael Wolff, que salieron a la luz el miércoles. En el libro, se cita a Bannon pronosticar que la investigación de Robert Mueller sobre Rusia encontrará pruebas contundentes de lavado de dinero: “Van a destruir a Don Junior en televisión nacional”.
Hablando acerca de una reunión celebrada en la Trump Tower en junio de 2016 entre una abogada rusa y altos funcionarios de la campaña de Trump –Donald Trump Junior, Jared Kushner y Paul Manafort–, el libro cita a Bannon decir: “Las tres figuras más importantes de la campaña pensaron que era una buena idea reunirse con un gobierno extranjero en la sala de conferencias en el 25° piso de la Trump Tower, sin sus abogados presentes. No había ningún abogado. Aun si consideraban que esto no era traición o un acto antipatriótico o algo [improperio] malo, y yo creo que fue todo eso, deberían haber llamado al FBI de inmediato”.
Los comentarios de Bannon provocaron que los abogados del presidente Trump emitieran una carta de cese y desistimiento en la que afirman que Bannon violó un acuerdo de confidencialidad. En una declaración, el presidente Trump escribió: “Steve Bannon no tiene ningún vínculo conmigo ni con mi presidencia. Cuando fue despedido, no sólo perdió su trabajo, sino que también perdió la razón. …Steve no representa a mi base, está solo en esto”.
En la Casa Blanca, la secretaria de prensa Sarah Huckabee Sanders dijo que el libro es una “ordinaria ficción sensacionalista”, mientras los periodistas la atosigaron con preguntas sobre las revelaciones del libro.
Peter Alexander: “¿El hijo del presidente, Donald Trump Jr, cometió traición?
Sarah Huckabee Sanders: “Creo que es una acusación sin sentido, y estoy segura de que la hemos abordado muchas veces desde este podio. Si esto se refiere a los comentarios del Sr. Bannon, los remito a los que realizó anteriormente en [el programa televisivo] 60 Minutes, cuando calificó de farsa absoluta la conspiración con Rusia respecto de nuestro presidente. De modo que yo me remitiría a eso. Si alguien ha sido incoherente es él. Sin duda no lo han sido el presidente ni este gobierno”.
El ex director de campaña del presidente Trump, Paul Manafort, entabló una demanda ante un tribunal federal el miércoles para intentar limitar el poder del fiscal especial Robert Mueller, acusando de extralimitarse en sus facultades a su investigación sobre los presuntos vínculos entre Trump y Rusia. En octubre, Mueller presentó 12 acusaciones contra Manafort y su ex socio Rick Gates, que incluyeron el lavado de dinero, actuar como agentes no registrados del ex gobierno de Ucrania favorable a Rusia y conspirar contra Estados Unidos.
El presidente Trump cerró abruptamente la Comisión Asesora Presidencial sobre Integridad Electoral el miércoles, después de que esta no pudiera proporcionar pruebas de fraude electoral. Grupos defensores de los derechos civiles afirman que el verdadero objetivo de la comisión era sentar las bases para suprimir el voto a nivel nacional. El presidente de la comisión, Kris Kobach, responsabilizó del cierre de la investigación a “un aluvión de demandas infundadas”, después de que la mayoría de los estados de Estados Unidos y el distrito de Columbia se negaran a proporcionar datos a la comisión. Kobach tiene antecedentes de haber empleado tácticas para suprimir el voto cuando era secretario de Estado de Kansas y consultor del Partido Republicano. El presidente Trump ha afirmado falsamente en reiteradas ocasiones que perdió el voto popular ante Hillary Clinton en 2016 porque se emitieron entre tres y cinco millones de votos no autorizados en las elecciones.
Una gran tormenta de invierno está azotando la costa del océano Atlántico de Estados Unidos atrayendo fuertes vientos, inundaciones de las zonas costeras y una fuerte nevada que llegó a ciudades del sur de la costa este como Savannah, Georgia; y partes del norte de Florida. Los meteorólogos describieron la tormenta como una “ciclogénesis explosiva” que provocó un abrupto descenso de la presión atmosférica y se intensificó rápidamente en la costa atlántica. Se prevé que tras la tormenta se registrarán temperaturas gélidas, mientras el “vórtice polar” regresa a gran parte de Estados Unidos a finales de esta semana. El mes pasado, el presidente Trump citó las frías temperaturas invernales para reiterar su afirmación de que el calentamiento global es una farsa, pero climatólogos afirman que las emisiones de gases de efecto invernadero podrían estar contribuyendo a estos eventos climáticos.
En Baltimore, Maryland, padres, docentes y alumnos están protestando contra las condiciones gélidas de las escuelas públicas, donde los alumnos se congelan en las clases y las temperaturas apenas superan los 0° Celsius. En las redes sociales circularon fotografías en las que aparecen niños abrigados con parcas de invierno sentados en el piso del salón de clase; en otras imágenes se puede ver un aula y un gimnasio en muy mal estado después de que se inundaran tras la explosión de unas cañerías; y el termómetro en uno de los salones de clase que marcaba 5° Celsius. El Sindicato de Docentes de Baltimore condenó las condiciones, que describió como “injustas” e “inhumanas”, e instó a los funcionarios a que cerraran las escuelas por el resto de la semana. El senador del estado Bill Ferguson, ex docente de educación pública de Baltimore, dijo que las escuelas de la ciudad solicitaron fondos para calefacción y aire acondicionado, pero se los negaron debido a “restricciones fiscales”. Ferguson criticó al gobernador Bill Hogan en Twitter: “El gobernador Hogan dice que se destinaron fondos suficientes a la ciudad de Baltimore y que no se necesitan recursos adicionales”.
En los territorios ocupados de Cisjordania, las fuerzas israelíes mataron a disparos al palestino Musab Tamimi, de 17 años, durante una protesta cerca de Ramala el miércoles. Se trata del primer adolescente que muere en manos de las fuerzas israelíes en 2018. Tamimi es el palestino número 16 que muere en manifestaciones desde que el presidente Trump declaró el mes pasado que Estados Unidos reconocería a Jerusalén como la capital de Israel. Testigos afirman que Tamimi estaba desarmado cuando recibió un disparo en el cuello.
El padre de Musab Tamimi, Firas Tamimi, declaró: “Los soldados arrestaron a un niño con problemas mentales, y cuando intenté liberarlo el oficial me dijo: ‘Queremos matar a alguien’. Fui a apartar a los jóvenes, porque vi la mala intención en su mirada. Estaba cerca de los jóvenes cuando los soldados dispararon a mi hijo en el cuello y lo mataron. Estaba a unos cinco o seis metros de distancia de él. Gracias a Dios que es un mártir”.
Musab Tamimi era pariente de la adolescente palestina de 16 años Ahed Tamimi, que está en custodia israelí aguardando su juicio ante un tribunal militar después de que se volviera viral un video en el que se la ve abofeteando a un soldado israelí.
El Gobierno de Israel ordenó a miles de inmigrantes africanos que abandonen el país dentro de los próximos 90 días o serán arrestados. El plan fue anunciado al tiempo que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, llamó a los inmigrantes africanos “infiltrados” durante una reunión de gabinete el miércoles.
Benjamin Netanyahu expresó: “Los infiltrados tienen una sencilla elección: o cooperan con nosotros y se van de manera voluntaria, respetuosa, humana y legal, o tendremos que utilizar los numerosos medios que tenemos a nuestra disposición, que también están dentro de la ley. Espero que elijan cooperar con nosotros”.
La mayoría de los estimados 40.000 inmigrantes en Israel son refugiados de Eritrea y Sudán que huyeron de la guerra y de la persecución, si bien Israel los considera inmigrantes económicos.
Mientras tanto, miembros del Parlamento israelí, conocido como la Knesset, estallaron en protestas el miércoles, luego de que el primer ministro israelí Netanyahu y legisladores de derecha promovieran una legislación que facilitaría la aplicación de la pena de muerte a palestinos acusados de terrorismo. La pena capital es legal en Israel, pero no ha sido implementada desde 1962, cuando el líder nazi Adolf Eichmann fue ejecutado por su participación en el Holocausto.
En Irán, decenas de miles de personas tomaron las calles el miércoles en ciudades de todo el país, manifestándose a favor del Gobierno. Las movilizaciones, aprobadas por el Estado, se hicieron una semana después de que estallaran las protestas en contra del Gobierno en todo Irán por la alta tasa de desempleo, la desigualdad y el aumento de los costos de la vivienda. El miércoles, el director de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica afirmó que ya no habría más “sedición” y que los líderes de las protestas fueron arrestados. Los medios estatales informaron que más de 500 personas fueron arrestadas en todo Irán.
En Etiopía, el primer ministro, Hailemariam Desalegne, dijo el miércoles que liberará a todos los presos políticos de Etiopía y que cerrará una tristemente célebre prisión que grupos activistas por los derechos humanos han calificado de cámara de tortura. Amnistía Internacional celebró el sorpresivo anuncio, afirmando que si las autoridades cumplen lo dicho, sería el fin de “una era de sangrienta represión en Etiopía”. Dicho país continúa siendo un importante aliado de Estados Unidos en África, a pesar de su largo historial de violaciones de derechos humanos y de sus antecedentes en silenciar a periodistas, activistas y partidos políticos de la oposición.
En Estados Unidos, el director en funciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos dijo que los políticos que se resistan a las políticas de inmigración del gobierno de Trump deberían ser arrestados y enfrentar cargos criminales. Thomas Homan hizo el comentario el martes durante una aparición en Fox News, un día después de que California se declarara formalmente un “estado santuario” para inmigrantes.
Thomas Homan expresó: “Será mejor que California se prepare. Están a punto de ver más agentes especiales, y muchas más órdenes de deportación. Si los políticos de California no quieren proteger a sus comunidades, entonces lo hará el Servicio de Inmigración”.
El comentario de Homan es realizado al tiempo que el Gobierno de Trump continúa su campaña para forzar a los policías locales a cooperar con los planes de deportación masiva del Gobierno federal.
El estado de Washington presentó una demanda el miércoles contra la cadena de hoteles económicos Motel 6, acusándola de violar leyes contra la discriminación y de privacidad al entregar información personal de sus huéspedes al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos. El fiscal general de Washington, Bob Ferguson, afirma que los gerentes del hotel les brindaron nombres, fechas de nacimiento, números de licencia de conducir y de matrícula de más de 9.000 huéspedes a funcionarios de inmigración, quienes analizaron las listas buscando nombres “que sonaran latinos”, lo que llevó al arresto de más de seis personas. La demanda es realizada cuatro meses después de que el medio de noticias Phoenix New Times reportara que los gerentes de Motel 6 en Arizona habían llegado a un acuerdo similar de cooperación con el Servicio de Inmigración.
En la ciudad de Nueva York, la hija del inmigrante haitiano Jean Montrevil afirmó que su padre fue arrestado el miércoles por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos afuera de su hogar en el barrio Far Rockaway en Queens, y que fue llevado a la cárcel del condado Essex. Jean Montrevil llegó a Estados Unidos desde Haití con una “tarjeta verde” de residencia permanente en 1986, con 17 años de edad. El pasado junio, cuando asistió a su primer control bajo la presidencia de Donald Trump, Montrevil fue detenido, esposado y procesado para ser deportado, hasta que las solicitudes de sus defensores aparentemente condujeron a su liberación. Hablando en Democracy Now! el verano pasado, Jean Montrevil describió los peligros que enfrentaría si es deportado a Haití.
Jean Montrevil afirmó: “Una vez que te deportan como extranjero criminal, debes pasar por un proceso en Haití. Debes ser entrevistado por el gobierno haitiano, y luego debe venir un miembro de tu familia a autorizar tu liberación. No tengo familiares en Haití, todos viven aquí ahora. Y si no te liberan, debes pagar para salir. Ganan dinero con los deportados criminales en Haití. Y han muerto personas en cárceles haitianas”.
El arresto de Montrevil llevado a cabo el miércoles por el Servicio de Inmigración fue realizado luego de que el gobierno de Trump anunciara que revocará un programa especial de inmigración para casi 60.000 haitianos, muchos de los cuales llegaron a Estados Unidos luego de un devastador terremoto en 2010. El programa, conocido como Estatus de Protección Temporal, llegará a su fin en julio de 2019.
En el Capitolio de Washington DC, el vicepresidente Mike Pence tomó juramento el jueves a dos demócratas en el Senado, por lo que ahora los demócratas tienen 49 bancas en el Senado, contra las 51 de los republicanos. Los demócratas están ahora a solo dos bancas de obtener la mayoría en el Senado, luego de que el ex fiscal general Doug Jones venciera al republicano Roy Moore en unas elecciones especiales realizadas el mes pasado. Jones obtuvo la banca el miércoles junto con Tina Smith de Minnesota, quien fue nombrada por el gobernador Mark Dayton para reemplazar al ex senador Al Franken. Franken renunció formalmente el jueves, luego de que al menos siete mujeres lo acusaran de haberlas manoseado o intentado besarlas sin su consentimiento.
Y los senadores de Connecticut, Richard Blumenthal y Chris Murphy, culminaron una visita de dos días a Puerto Rico, advirtiendo que la isla continúa en un estado “deplorable” más de 100 días después del paso del huracán María. El senador Murphy observó que el Congreso aprobó un paquete de ayuda para catástrofes de 36.500 millones de dólares para los estados devastados por el huracán y Puerto Rico, pero afirmó que gran parte de los fondos necesarios, incluyendo el programa de vivienda Community Development Block Grants, no han llegado a la isla.
El senador Chris Murphy expresó: “La Casa Blanca le envía muy poco dinero al gobierno puertorriqueño, haciéndolo pasar por todo tipo de burocracia y papeleos innecesarios. Y el resultado de ello es que la economía sigue desangrándose”.