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El papa Francisco reconoció la santidad del arzobispo salvadoreño Óscar Romero, defensor de los pobres y oprimidos. Romero fue asesinado por miembros de un escuadrón de la muerte de derecha respaldado por EE.UU. en el año 1980, al comienzo de la brutal campaña de represión militar respaldada por EE.UU. en El Salvador. Con el lazo de soga manchado de sangre, que Romero llevaba cuando fue asesinado, el papa Francisco lo elogió por olvidar su propia vida “para estar cerca de los pobres y de su gente”.
Para saber más de este tema, puede ver la conversación que mantuvimos (en inglés) con Matt Eisenbrandt. Eisenbrandt es abogado de derechos humanos y autor del libro “Assassination of a Saint: The Plot to Murder Óscar Romero and the Quest to Bring His Killers to Justice” (El asesinato de un santo: el complot para matar a Óscar Romero y el intento de llevar a los asesinos ante la justicia). Eisenbrandt fue miembro del equipo que llevó adelante el juicio y emitió el único veredicto por el asesinato de Romero.