En el estado de Nueva Jersey, Estados Unidos, funcionarios de la ciudad de Newark comenzaron a advertir a la población que evite beber agua del grifo sin filtrar, luego de que un nuevo estudio reveló que podría estar filtrándose plomo en el suministro de agua. Los funcionarios también comenzaron a distribuir filtros de agua por toda la ciudad. Esto ocurre después de que durante el último año y medio los funcionarios de Newark han afirmado que el agua de la ciudad era segura para beber, a pesar de las crecientes advertencias y de una demanda judicial presentada por grupos ambientalistas. Muchos señalan que este caso es similar al del envenenamiento con plomo que se produjo en la ciudad de Flint, en el estado de Michigan, donde los funcionarios también ignoraron las inquietudes de la población y trataron de encubrir la crisis en torno a la contaminación del agua. Muchos han sido imputados en el caso Flint.
Funcionarios de la ciudad de Newark sostienen que el agua del grifo no es segura
Titular01 Nov. 2018
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