Los votantes de Colorado lograron obtener una iniciativa electoral contra el fracking en las elecciones de noviembre en todo el estado. La proposición 112 exigiría que las empresas coloquen los nuevos pozos a al menos 760 metros de viviendas, escuelas, cursos de agua y otras áreas consideradas “vulnerables”. Esta distancia es de dos veces y medio a cinco veces más que la actual regulación del estado. La iniciativa no tiene precedentes en su alcance porque podría prohibir nuevos pozos en el 95 por ciento de las tierras en los condados de mayor producción. Los ejecutivos de la industria están observando con preocupación, temerosos de que la Proposición 112 aliente medidas similares en todo el país. En respuesta a esto, la industria del petróleo y el gas gastó millones de dólares para derrotar la iniciativa; y al mismo tiempo, puso millones de dólares detrás de una medida diferente en la boleta electoral que enmendaría la constitución para que los propietarios puedan iniciar demandas judiciales a los gobiernos locales por regular industrias como el fracking.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos (en inglés) a David Sirota. Sirota es periodista de investigación de la revista online Capital & Main.