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El viernes, la gobernadora de Iowa firmó uno de los proyectos de ley de aborto más restrictivo del país. La nueva ley exige que toda mujer que pida un aborto se realice una ecografía abdominal y prohíbe el aborto si se detecta un latido del corazón. Esto suele ocurrir en la sexta semana de embarazo, antes que muchas mujeres sepan que están embarazadas. Mientras tanto, en Carolina del Sur, los legisladores demócratas usaron una estrategia de dilación para derrotar una prohibición de aborto presentada por los republicanos, que habría prohibido al menos el 97 por ciento de los abortos en ese estado. Asimismo, el mes pasado, un tribunal federal de apelaciones declaró la inconstitucionalidad de una ley sobre el aborto en Indiana firmada en 2016 por el vicepresidente Mike Pence cuando era gobernador. La ley limitaba la posibilidad de que una mujer pidiera un aborto incluso en los casos en que el bebé naciera con una discapacidad.
Para saber más del ataque contra los derechos reproductivos de las mujeres en todo Estados Unidos, puede ver la conversación que tuvimos (en inglés) con Cecile Richards. Richards acaba de dejar el cargo de presidente de la organización Planned Parenthood tras doce años de ejercer el cargo. Además, acaba de publicar una biografía titulada “Make Trouble: Standing Up, Speaking Out, and Finding the Courage to Lead” (Causemos problemas: pongámonos de pie, alcemos la voz y encontremos el coraje para ser líder). En el libro escribe: “Por primera vez en mi vida, me pregunto si mis propias hijas tendrán menos derechos de los que yo tuve.
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