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A último momento, se suspendió la deportación de una mujer originaria de Bangladesh, tras las protestas pública contra su traslado. La deportación de Salma Sikandar se suspendió cuando faltaban menos de 24 horas para que abordara un vuelo con pasaje de ida a Bangladesh y dejara a su esposo y su hijo estadounidense de 17 años. Sikandar vivió en Estados Unidos durante casi veinte años. Pero en junio, los funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) le informaron que debía abandonar el país en agosto. En ese momento su comunidad se involucró e hizo protestas en New Haven y una huelga de hambre frente a la oficina de ICE en Hartford para exigir que Sikandar pudiera permanecer en Estados Unidos.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que les hicimos (en inglés) a Salma Sikandar y su hijo, Samir Mahmud. Samir empezará sus estudios universitarios en la Universidad de Quinnipiac la semana que viene. Toda su vida, el sueño de Sikandar fue mandar a su hijo a la universidad.