Impactantes documentos nuevos revelan que Monsanto, el gigante estadounidense de los negocios agropecuarios, dirigió un “centro de fusión” para vigilar y desacreditar a los periodistas y los activistas que criticaban o escribían informes condenatorios de la empresa, así como al legendario cantautor Neil Young que publicó un álbum en 2015 llamado “The Monsanto Years”. Monsanto monitoreó la actividad en Twitter de Young e incluso analizó las letras de las canciones de su álbum. El centro de fusión también vigiló a la periodista Carey Gillam que ha hecho una amplia investigación y ha escrito acerca de Monsanto y el conocido pesticida Roundup, vinculado con el cáncer. La empresa también apuntó contra el grupo de investigación sin fines de lucro U.S. Right to Know que hizo un pedido para que se aplique la Ley de Libertad de la Información a la empresa.
Para saber más de este tema, puede ver la conversación que mantuvimos (en inglés) con Carey Gillam y Gary Ruskin. Gillam, que se comunica con nosotros desde la ciudad de Kansas, Missouri, es una periodista de investigación de larga trayectoria y autora de “Whitewash: The Story of a Weed Killer, Cancer, and the Corruption of Science”(Blanqueamiento: la historia de un herbicida, el cáncer y la corrupción de la ciencia). Ruskin, se comunica desde Berkeley, California, es cofundador de la organización U.S. Right to Know.