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El sábado 22 de febrero tendrá lugar en el estado de Nevada la tercera votación de las elecciones internas primarias para determinar la candidatura presidencial del Partido Demócrata para el 2020 en Estados Unidos. Uno de los apoyos electorales más codiciados en este estado es el del sindicato gastronómico, que representa unos 60.000 personas empleadas de la industria hotelera y gastronómica de Las Vegas y Reno, y cuyos integrantes son en un 54% “Latinx” (nombre con el que se visibiliza en su diversidad el sector activista migrante de países latinoamericanos en Estados Unidos). Sin embargo, la semana pasada, este sindicato decidió no dar su respaldo a ninguna de las actuales candidaturas. Nevada es un estado que tiene legislación de “derecho al trabajo” (que prohibe que el aporte a los sindicatos sea obligatorio y se incluya en las negociaciones contractuales colectivas), por lo que una de las estrategias del sindicato gastronómico para atraer miembros es ofrecer cobertura médica. En este contexto, el sindicato ha declarado que apoya que haya “diferentes opciones” en cuanto a la cobertura médica. En la contienda electoral, la participación del personal empleado en el sector servicios puede ser clave para ganar los caucus de Nevada.
Para profundizar esta información, vea (en inglés) nuestra conversación con Hamilton Nolan, periodista del periódico In These Times especializado en la temática del trabajo, y Marcie Wells, activista, mesera, madre soltera e integrante de la sección 226 del sindicato gastronómico de Nevada hace 16 años. Su ensayo publicado por el medio comunitario CommonDreams.org se titula “I Have 'Some of the Best' Health Insurance a Union Member Can Get, But I Would Trade It Today for Medicare for All” (Tengo una cobertura médica 'de las mejores' que puede obtener una trabajadora sindicalizada, pero renunciaría a ella hoy mismo por el 'Medicare para todos').
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