Estados Unidos se ha convertido en el epicentro de la pandemia del coronavirus, sobrepasando a China en casos de COVID-19. El virus continuó su crecimiento exponencial el jueves, aumentando repentinamente a más de 85.000 casos en el país; no obstante, el número real de casos es indudablemente mucho mayor. Más de 1.300 personas en todo Estados Unidos han muerto a causa del virus, y se prevé que la tasa de mortalidad se acelere en los próximos días. Esto ocurre al tiempo que el presidente Donald Trump continúa desafiando a sus asesores científicos y minimizando la amenaza de la pandemia.
En la ciudad de Nueva York, el mayor epicentro de la pandemia en Estados Unidos, 84 pacientes de COVID-19 fallecieron el jueves, al tiempo que una oleada tras otra de personas gravemente enfermas inundaron las unidades de cuidados intensivos y amenazaron con desbordar la capacidad del sistema de salud. Las facultades de medicina de la Universidad de Nueva York y Columbia anunciaron que permitirán que los estudiantes de medicina se gradúen anticipadamente con el objetivo de unirse a la lucha contra la COVID-19, a medida que las hospitalizaciones aumentaron en un 40% el jueves.
Ante la creciente escasez de camas de cuidados intensivos y respiradores —equipos esenciales para salvar vidas—, el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, pidió a las autoridades federales que envíen 15.000 respiradores adicionales, la mitad de los 30.000 que, según sostiene, son necesarios para mantener respirando a aquellos pacientes en estado crítico.
El alcalde Bill de Blasio afirmó: “Si se cuenta con un respirador, se puede salvar una vida, se puede ayudar a alguien a afrontar esta crisis para que pueda recuperarse. Si no tenemos respiradores, morirán personas que no tenían que morir, es tan simple como eso”.
Algunos hospitales de la ciudad de Nueva York han comenzado a dividir los respiradores para permitir que dos pacientes utilicen un solo dispositivo, al tiempo que el personal de enfermería teme que una escasez inminente de equipamiento los obligue a decidir quién vive y quién muere.
Funcionarios de Nueva York están solicitando a la Casa Blanca que utilice la Ley de Producción de Defensa para ordenar a empresas la fabricación de respiradores y otros insumos médicos esenciales; sin embargo, el presidente Donald Trump se ha rehusado, diciendo que los líderes empresariales han prometido estar a la altura del desafío sin intervención del Gobierno.
El periódico The New York Times informa que la Casa Blanca ha cancelado un acuerdo con General Motors y Ventec Life Systems para producir hasta 80.000 respiradores, que se necesitan con urgencia, debido a las preocupaciones sobre los 1.000 millones de dólares que costaría el proyecto, aproximadamente el 0.05% del costo del paquete de medidas de emergencia aprobado por el Senado para contrarrestar la crisis del coronavirus.
El jueves, Trump sostuvo que dudaba que la solicitud urgente de 30.000 respiradores hecha por Nueva York estuviera justificada. Estas son las palabras expresadas por Trump en el canal de noticias Fox News.
El presidente Donald Trump afirmó: “No creo que necesiten 40.000 o 30.000 respiradores. En los hospitales importantes a veces tienen dos respiradores y ahora, de repente, dicen ‘¿nos pueden enviar 30.000 respiradores?’”.
El medio Político informa que la Casa Blanca no siguió cientos de pautas de respuesta ante una pandemia que estaban establecidas en un manual de 69 páginas elaborado por el Consejo de Seguridad Nacional, desperdiciando más de dos meses en los que el Gobierno federal debería haberse movilizado para detectar nuevos contagios y adquirir equipamientos médicos esenciales. La agencia de noticias ProPublica ha publicado correos electrónicos internos que detallan cómo los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades subestimaron la amenaza del virus y no comunicaron de forma clara sus políticas a los funcionarios locales de salud pública.
En noticias sobre inmigración, tres menores inmigrantes no acompañados han dado positivo por COVID-19 mientras permanecen bajo custodia de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados en Nueva York. También dieron positivo recientemente cinco miembros del personal y un trabajador autónomo en tres instalaciones diferentes en Nueva York. Aun así, la agencia sostiene que continuará manteniendo a los niños separados de sus familias bajo su custodia hasta que se levanten las cuarentenas en las instalaciones de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados.
Esto ocurre al tiempo que un inmigrante guatemalteco de 52 años recluido en el Centro Correccional del Condado de Essex, en la ciudad de Newark, en Nueva Jersey, ha dado positivo por COVID-19. En el estado de Luisiana, solicitantes de asilo detenidos en el Centro de Detención Richwood han estado en huelga de hambre durante al menos cuatro días, exigiendo ser liberados ya que temen contraer el coronavirus.
En el estado de Georgia, al menos 350 inmigrantes detenidos en el Centro de Detención con fines de lucro Stewart, conocido por su continua negligencia médica, también realizaron una huelga de hambre exigiendo su liberación inmediata. En grabaciones de audio, los inmigrantes detenidos describen condiciones de hacinamiento, planificación deficiente y el pánico creciente entre los prisioneros.
Solicitante de asilo: “Aquí estamos frustrados por la incertidumbre porque no sabemos en qué momento podemos ser contagiados por el exterior, por gente que viene del exterior. En cualquier momento podemos estar contagiados, al salir afuera, al salir al patio, al salir a comer. En todo momento corremos el riesgo de contagio. Entonces, el propósito de la huelga es pedirle a ICE que por humanidad nos de la libertad”.
Italia registró otras 662 muertes por coronavirus el jueves, que elevan la cifra total de fallecidos en ese país a más de 8.200, más del doble de la cifra de muertos en China, donde se inició la pandemia. Algunos pacientes italianos fueron trasladados a Alemania debido a una grave escasez de respiradores y otros suministros médicos.
España vivió su peor día de esta crisis hasta el momento, al registrarse 769 muertes por COVID-19 en las últimas 24 horas.
En el Reino Unido, el primer ministro Boris Johnson anunció en un video publicado hoy en Twitter que su prueba de diagnóstico de COVID-19 resultó positiva, por lo que trabajará desde su domicilio bajo confinamiento voluntario.
Por su parte, Irlanda nacionalizará la totalidad de su sistema de salud durante la pandemia. Las siguientes son palabras del ministro de Salud irlandés, Simon Harris.
Simon Harris declaró: “Los pacientes que contraigan este virus recibirán asistencia gratuita y serán atendidos en el marco de un único servicio nacional hospitalario. Como lo explicó el primer ministro, hoy recibí autorización del Gobierno para que, durante esta crisis, el Estado asuma el control de todas las instalaciones hospitalarias privadas y gestione todos los recursos para beneficio común de toda nuestra población. No hay diferencia entre lo privado y lo público cuando se trata de una pandemia”.
China anunció que prohibirá el ingreso al país de casi todos los extranjeros, en un intento de prevenir una segunda ola de contagios de coronavirus.
En Japón, el primer ministro Shinzo Abe se opuso a las solicitudes de imponer el confinamiento en algunas ciudades, aludiendo a las graves consecuencias económicas que tendría una orden de quedarse en casa. Bares, restaurantes y comercios de la superpoblada capital, Tokio, permanecen abiertos, a pesar del incremento de nuevos casos allí registrados. Oficialmente, Japón tiene más de 1.400 casos confirmados, pero seguramente la cifra real es mucho mayor.
En África, el presidente de Etiopía liberó a más de 4.000 presos en el marco de una iniciativa que tiene por objetivo evitar la superpoblación en las cárceles y contener la propagación del coronavirus. La medida tuvo lugar al tiempo que los habitantes de este país solicitan a su Gobierno que levante los bloqueos de internet impuestos durante meses en diferentes zonas de Etiopía donde se han registrado enfrentamientos entre fuerzas del Gobierno y un grupo separatista oromo. Los cortes en el servicio han impedido que millones de personas accedan a información sobre la pandemia.
En Sudáfrica, donde se inician hoy tres semanas de confinamiento a nivel nacional, se reportaron dos muertes por COVID-19 entre los más de 900 casos confirmados. Por otra parte, en Egipto, las autoridades expulsaron a la periodista del periódico The Guardian Ruth Michaelson luego de que esta informara que Egipto tiene muchos más casos de coronavirus de los que se han reportado oficialmente.
En América Latina, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, eximió a las iglesias de acatar el confinamiento impuesto a causa del coronavirus, tras clasificar las ceremonias religiosas como “servicios esenciales”, accediendo así a las solicitudes de líderes evangélicos. Los casos confirmados de coronavirus en Brasil se dispararon la última semana a casi 3.000.
En México, el gobernador del estado de Puebla enfrenta críticas tras afirmar que los pobres son inmunes a la COVID-19. Por su parte, el Gobierno mexicano suspendió temporalmente las solicitudes de asilo al tiempo que ese país intenta promover el distanciamiento social y que sean limitados los servicios no esenciales. México ha confirmado casi 600 casos de COVID-19 en medio de una grave escasez de pruebas de diagnóstico.
En Estados Unidos, la Agencia de Protección Ambiental anunció el jueves la suspensión por tiempo indefinido de la aplicación de normas de protección ambiental e informó al sector empresarial que efectivamente se le permitirá autorregularse durante la pandemia de coronavirus. En virtud de las nuevas directivas, los grandes contaminantes no serán sancionados por incumplir normas que ordenan notificar incidentes de contaminación y otras obligaciones. La exresponsable del cumplimiento de normas ambientales de la Agencia de Protección Ambiental Cynthia Giles, que se desempeñó en ese organismo durante la presidencia de Barack Obama, dijo al medio The Hill que la medida “les dice a las compañías de todo el país que no serán obligadas a cumplir, incluso si contaminan el aire y el agua en incumplimiento de leyes federales, si declaran que dichos incumplimientos fueron ‘causados’ de alguna manera por la pandemia del [coronavirus]. Y además los exime de realizar monitoreos, por lo que nunca podríamos llegar a conocer cuán grave fue el incumplimiento de las normas ambientales”.
En noticias sobre el cambio climático, las temperaturas extremas del océano registradas a lo largo de la Gran Barrera de Coral de Australia han provocado un blanqueo masivo de corales, el tercero registrado en ese arrecife en los últimos cinco años. Un estudio reciente llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Hawái predice que la contaminación y el cambio climático destruirán entre el 70% y el 90% de los arrecifes de coral del mundo en los próximos veinte años.
En un duro golpe a los derechos civiles, la Corte Suprema emitió el lunes por unanimidad un fallo que hará más difícil presentar demandas por discriminación racial en negociaciones laborales y contractuales. La Corte Suprema dejó sin efecto el fallo de un tribunal inferior que permitió la presentación de una demanda judicial por 20.000 millones de dólares contra Comcast. En la demanda se acusaba a la compañía de televisión de discriminar a los canales de propiedad de afroestadounidenses al negarse a emitir sus contenidos.
El Gobierno de Donald Trump acusó formalmente al presidente venezolano, Nicolás Maduro, contra quien presentó cargos por narcoterrorismo y tráfico internacional de cocaína. El fiscal general estadounidense, William Barr, presentó los cargos el jueves, alegando que el partido de Maduro, el Partido Socialista Unido de Venezuela, se asoció con facciones disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia “para inundar Estados Unidos de cocaína”, haciendo uso del narcotráfico como un “arma contra Estados Unidos”. El Departamento de Estado ofreció una recompensa de 15 millones de dólares por información que pueda conducir al arresto de Maduro.
En un discurso nacional pronunciado el jueves, Maduro desestimó los cargos calificandolos de otro intento de golpe de Estado impulsado por Washington. Maduro criticó duramente a Trump, a quien llamó “vaquero racista” y le devolvió el ataque aludiendo al manejo de Estados Unidos de la crisis provocada por el coronavirus.
El presidente Nicolás Maduro afirmó: “El epicentro de la pandemia del coronavirus a girado hacia los Estados Unidos de Norte América y esto es muy peligroso para todos los americanos. Los americanos del norte, los americanos del sur, los americanos del centro, el Caribe, para toda nuestra región porque Estados Unidos se convierte en una amenaza a la salud pública de América Latina, del Caribe y del mundo. No hay sistema de salud público en los Estados Unidos, no hay sistema de salud público, todo el sistema es privatizado”.
La periodista estadounidense de origen indio de 30 años de edad Liyna Anwar falleció tras una larga lucha contra una agresiva forma de leucemia. Su lucha por lograr un transplante de células madre que le salvara la vida dejó al descubierto la disparidad racial existente en el registro nacional de células madre e inspiró una campaña nacional que instaba a descendientes de personas provenientes de Asia del Sur a convertirse en donantes de células madre.
Visite democracynow.org/es para ver más información acerca de la lucha de Liyna.